Airbus SE cumplió con su objetivo de elevar el beneficio este año pese a que el fabricante de aviones tiene dificultades para ajustarse a su programa de aeronaves de pasajeros más grandes y la dirección enfrenta cada vez más investigaciones por corrupción debido a la utilización de agentes de ventas.
Mientras se evalúan estos problemas, las entregas del A350, su avión de fuselaje ancho clave, aumentaron al resolverse los cuellos de botella en el fabricante de asientos Zodiac Aerospace, lo cual eleva las perspectivas de que Airbus incremente el total anual en un 50 por ciento tal como lo había establecido.
El fabricante de aviones todavía aspira a entregar este año más de 700 aviones de pasajeros de toda su cartera, y dijo que está en vías de producir 10 A350 por mes para fines de 2018.

“Confirmamos nuestra perspectiva, pese a que el programa de entregas de este año está extremadamente demorado, en gran medida debido a los problemas de motor ya conocidos que afectaron a nuestra familia A320neo”, dijo el máximo responsable Tom Enders.

Las ganancias antes de intereses, impuestos y partidas únicas cayeron 4 por ciento en el tercer trimestre hasta 697 millones de euros (US$811 millones), superando la estimación promedio de los analistas de 632 millones de euros.

Las acciones de Airbus subieron 3,4 por ciento hasta 87,61 euros y estaban un 2,7 por ciento arriba en París. Esto llevó las alzas de este año a 38 por ciento para un valor total de 67.400 millones de euros (US$78.500 millones).

La producción del avión de la serie A320neo no alcanzará este año su meta anual de unas 200 aeronaves dado que los problemas técnicos del motor siguen afligiendo al aparato de pasillo único, dijo Airbus, con sede en Toulouse, Francia, en un comunicado este martes.
La empresa también dijo que está trabajando con las autoridades estadounidenses a raíz de no haber aportado suficientes detalles sobre la utilización de intermediarios en algunos acuerdos del área de defensa.
Nuevo problema. Este nuevo problema relacionado con el cumplimiento de las normas se suma a las investigaciones que están llevando a cabo el Reino Unido, Francia, Alemania y Austria acerca del manejo, por parte de la compañía, de los contratos comerciales y de defensa que ha generado un amplio rechazo del sector público.
No está claro si la divulgación más reciente podría derivar en una investigación formal por parte del Departamento de Justicia de Estados Unidos, pero el Departamento de Estado no obstante autorizará a Airbus a solicitar licencias para la exportación de armas.

“Hemos descubierto y posteriormente informado a las autoridades estadounidenses pertinentes sobre las ITAR”, dijo el director financiero Harald Wilhelm, en una teleconferencia con periodistas.
Manifestó que el problema se relaciona con “las divulgaciones de ciertos agentes de ventas y las comisiones”.