Isabel Saco Davos (Suiza). EFE. América Latina fue identificada como un oasis de estabilidad, crecimiento y oportunidades durante el Foro Económico Mundial de Davos (Suiza), que concluyó ayer, en contraste con la incertidumbre general debido a la crisis financiera y económica que azota Europa y Estados Unidos.
El problema de la deuda soberana de la eurozona, la lentitud de la recuperación de la economía de Estados Unidos y la desaceleración del crecimiento en los países emergentes infundió pesimismo a esta cita anual en la localidad suiza de Davos, a la que Latinoamérica aportó optimismo.
Presidentes y ministros llegados de América Latina tuvieron que cumplir con agendas muy apretadas debido a la sucesión de reuniones mantenidas con los presidentes y consejeros delegados de multinacionales y grandes compañías que se reúnen cada año en el Foro de Davos.
Esta edición del Foro de Davos, fue, en este sentido, muy diferente a las precedentes, en las que el apetito estaba sobre todo dirigido a los grandes países emergentes, en particular China e India, que este año asumieron más nítidamente su nuevo rol de países inversores también en busca de oportunidades de negocio en América Latina. Muestra de ello fueron las reuniones que mantuvo el ministro colombiano de Energía y Minas, Mauricio Cárdenas con inversionistas indio y chinos.
Esfuerzo
Los presidentes de Perú, Ollanta Humala; de Panamá, Ricardo Martinelli, y México, Felipe Calderón, participaron en esta edición del Foro de Davos, durante la cual con el objetivo de impulsar la inversiones en sus respectivos países, se reunieron con numerosos directivos de empresas multinacionales.