MOSCÚ. AFP. Más de un centenar de detenidos iniciaron una huelga de hambre y cinco se cortaron las venas en una prisión de alta seguridad del sur de Rusia, para protestar por la polémica muerte de otro encarcelado, anunciaron hoy las autoridades penitenciarias.

Actualmente, 125 detenidos están en huelga de hambre en la prisión de Salavat, en la región de Bachkortostan, pero la situación es «estable» y la vida de los que se cortaron las venas no corre peligro, indicaron los responsables del centro penitenciario.  

Defensores de derechos humanos, citados por los medios rusos, indicaron, sin embargo, que más de 600 detenidos participaban en esta huelga de hambre iniciada el fin de semana pasado.  

Los detenidos protestan por la muerte de Sergueï Lasko que, según ellos, fue golpeado hasta la muerte por los funcionarios de prisiones. 

«Los responsables de la prisión insisten en que Lasko murió de una crisis cardíaca y que no hubo tortura», declaró a la agencia Ria Novosti Maria Kannabikh, de la Cámara Pública Rusa, órgano consultivo del Kremlin.  

«Pero representantes de la comisión de control de Bachkortostan dieron cuenta de palizas en masa en la prisión y de abusos por parte de las autoridades», añadió.