Bagdad/Mosul, 27 sep (dpa) – Al menos 14 personas perdieron la vida en la noche del domingo y hoy lunes en Irak en atentados, ataques aéreos y enfrentamientos entre tropas estadounidenses y insurgentes, según informaron diversas fuentes hospitalarias.
El Ejército de Estados Unidos bombardeó en la mañana de hoy posiciones de la insurgencia en Ciudad Sader, un suburbio chiita de Bagdad. Los ataques aéreos dejaron, según testigos, cinco muertos y 46 heridos, entre ellos también mujeres y niños.
El mando militar norteamericano en Bagdad se limitó a informar que la aviación había efectuado «ataques de precisión» contra «objetivos positivamente identificados» en Ciudad Sader, que destruyeron «varias posiciones enemigas».
El Ejército de Estados Unidos libra en este suburbio pobre de Bagdad una pequeña pero tenaz guerra contra el Ejército del Mahdi, la milicia del clérigo radical chiita Muktada Al Sader.
En Mosul, en el norte del país, al menos tres miembros de la Guadia Nacional iraquí murieron y otros siete resultaron heridos al explotar un coche bomba cerca de la mezquita de Nabi Yunis, en el centro de la ciudad, según informaron médicos de un hospital local.
Testigos relataron que la onda expansiva de la explosión destruyó dos coches patrulla de la Guardia Nacional. Al parecer, el coche bomba fue detonado por control remoto.
En la localidad de Jan Bani Saad, ubicada a 35 kilómetros de Bagdad, había explotado una bomba en un mercado de verduras en la noche del domingo, causando dos muertos y al menos cuatro heridos, según médicos de una clínica de la capital provincial Bakuba.
En Muktadiya, 40 kilómetros al noreste de Bagdad, un artefacto explosivo mató a un miembro de la Guardia Nacional que estaba realizando un patrullaje.
En la carretera que comunica Hilla con Nayaf, al sur de Bagdad, estalló en la mañana de hoy un artefacto explosivo al paso de un convoy estadounidense-polaco y un automóvil iraquí. La explosión causó la muerte del matrimonio que viajaba en el coche y dejó herido a su hijo.
En la zona industrial de Ramadi, 100 kilómetros al oeste de Bagdad, murió hoy un iraquí y resultaron heridos otros tres durante enfrentamientos entre tropas estadounidenses e insurgentes, informó el hospital de esta ciudad, uno de los bastiones de los rebeldes.