La Habana.- Al menos diez parejas pastorales de la Iglesia del Nazareno viajaban en el avión de Global Air operado por Cubana de Aviación que el viernes se estrelló en La Habana causando la muerte de 108 de las 111 personas que iban a bordo entre pasajeros y tripulación, informaron hoy fuentes religiosas.
El director Regional de la Iglesia del Nazareno de Mesoamérica, Carlos Saenz, confirmó a la página web oficial de esa organización religiosa que las parejas regresaban al este de Cuba tras participar en un retiro espiritual en La Habana.
El vuelo DMJ-972, operado por Cubana de Aviación con una aeronave alquilada a la aerolínea mexicana Global Air, cubría la ruta La Habana-Holguín y se estrelló ayer a las 12.08 (16.08 GMT) minutos después de despegar del aeropuerto José Martí de la capital por motivos que se investigan.
“Les pedimos de la manera más atenta y respetuosa que por favor nos unamos en oración todas por las familias y allegados afectados en esta tragedia”, dijo Saenz, según la página de la Iglesia del Nazareno.
Todos los miembros del grupo eran cubanos pertenecientes a comunidades evangélicas de Holguín y otras provincias de la zona oriental de la isla, y habían ido a la capital para tomar parte en un retiro espiritual, de acuerdo a la misma fuente.
Las labores de identificación ya han comenzado en el Instituto de Medicina Legal de La Habana, adonde están llegando los familiares de las 108 víctimas del vuelo DMJ-972, que cubría la ruta La Habana-Holguín y se estrelló minutos después de despegar del aeropuerto José Martí de la capital por causas aún no aclaradas.
Las autoridades cubanas han organizado un dispositivo de apoyo a las familias con atención médica y psicológica brindada por especialistas en escenarios postraumáticos.
Entre las 108 víctimas, en su mayoría ciudadanos de la isla, hay también una pareja argentina, dos hombres saharauis y una mujer mexicana, a los que se suman los seis miembros de la tripulación de la aeronave, también mexicanos. Tres mujeres sobrevivieron al siniestro y permanecen ingresadas en el hospital Calixto García de La Habana con pronóstico estable pero muy grave.