Santiago. A 16 días del asesinato del abogado Basilio Guzmán, por manos de sicarios a bordo de una motocicleta que lo interceptaron al salir de su residencia en el sector Los Cerros de Gurabo, se ignoran los responsables y las causas que pudieron haber ocasionado la muerte que conmovió a la comunidad jurídica de esta ciudad.

La Policía Nacional y el Ministerio Público, que al principio del suceso informaron que investigaban el hecho para dar con el paradero de los autores materiales e intelectuales, han mantenido silencio.

Pero la familia del malogrado jurista de 62 años y sus colegas de la toga y el birrete esperan por los resultados de las investigaciones.

Miledy López, presidenta del Colegio de Abogados de la República Dominicana, seccional Santiago, exigió de las autoridades continuar con las investigaciones objetivas y dar respuesta satisfactoria del hecho.

“Estamos esperando los resultados de las investigaciones del Ministerio Público para que de una pronta respuesta a la sociedad de este vil asesinato de nuestro colega”, expresó en declaraciones a reporteros de Hoy.

Basilio Guzmán es el tercer abogado asesinado en esta ciudad en los últimos ocho años, por lo menos de acuerdo a  la referencia de esos casos, en circunstancias que aún no han sido esclarecidas por las autoridades.

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Una de esas muertes de juristas que estremeció la ciudad corazón fue el asesinato del abogado Amancio Herrera Turbí, de 51 años, atacado a tiros por sicarios en abril de 2014, en la intersección de la avenida Francia con avenida Las Carreras,  en pleno centro de la ciudad. Murió momentos después en la Clínica Corominas.

La agresión contra el profesional del derecho se produjo cuando éste salía de su oficina situada próximo al Monumento a los Héroes de la Restauración, y dos hombres a bordo de una motocicleta la emprendieron a tiros en su contra, causándole heridas mortales.

Otra muerte violenta que enlutó a la comunidad jurídica fue la que se produjo contra el abogado José Delfín Díaz Díaz, de 51 años de edad, quien fuera reportado como desaparecido.

El cuerpo del profesional del derecho, quemado y con heridas de armas blancas,  fue hallado el 21 de octubre de 2016 en la comunidad El Flumen, en la entrada al distrito municipal La Canela, en esta ciudad.

Por lo menos en los dos primeros casos las investigaciones continúan en el limbo judicial, sin arrestos ni procesados. La sociedad aún mantiene la fe en que saldrán del anonimato y no mueran en la impunidad.