El Día Mundial del Pan se celebra el 16 de octubre de cada año. Es un homenaje para todos los panaderos del mundo y para quien quiera sumarse a la celebración en honor a un alimento básico que forma parte de la alimentación desde la prehistoria.

El Día Mundial del Pan (World Day of Bread) fue creado por la Federación Internacional de Panaderos (UIB) para dedicar un día a la historia y al futuro del pan, para compartir el trabajo de los panaderos, intercambiar pareceres sobre la materia prima con la que se elaboran tantas variedades del alimento.

Cada país tiene mucho que ofrecer al respecto, el pan es un alimento de gran valor nutricional que se consume a nivel mundial.

Muchos disfrutan haciendo pan casero, amasándolo, horneándolo, escuchando el crujido de su corteza, impregnando los alrededores con su aroma cuando sale del horno y saborearlo, sólo o acompañado, porque el buen pan no necesita compañeros para resultar una delicia al paladar.

Sin embargo, la mayoría de las personas consume el pan que preparan en las panaderías de los supermercados o en las independientes.

Como es el caso del Supermercados Bravo, donde ofrecen una extensa variedad de panes, desde el famoso pan de agua hasta la baguette de finas hierbas.

Este establecimiento comercial en su área de panadería se enfoca en ofrecer un producto artesanal, utilizando lo menos posible preservantes artificiales y maquinarias.

Es mucho más que un acompañamiento. De hecho, los productos con base de pan son los más frecuentes en la demanda de alimentos fuera del hogar (22,8%), seguidos de papas (14,9%), según estadísticas mundiales publicadas por la FAO.

La evolución de su uso en la cocina no sólo se queda en los formatos pequeños. En los restaurantes cada vez se demandan panes más grandes y la industria se ha sumado a esta tendencia con productos elaborados para el corte en la mesa en varias raciones que, además de ser funcionales, añaden originalidad a la presentación de este alimento.

Desde cambios en los formatos a nuevos panes con propiedades nutricionales, a sabores especiales destinados a satisfacer a un consumidor más exigente; algunos de los últimos lanzamientos son productos enriquecidos con fibras y frutos secos.

En el Bravo, además del pan con hierbas, ofrecen pan integral con 10 diez cereales y han introducido una nueva línea de repostería usando semilla de quinoa y linaza, tanto marrón como dorada.

Industria panadera de RD. La industria panadera nacional es un importante renglón productivo.

Este sector se compone de alrededor de 2,200 fábricas agrupadas en la Unión Nacional de Medianos y Pequeños Empresarios de la Harina (UMPIH), y otras tres mil panaderías pequeñas que no se encuentran afiliadas a ese sindicato, según informaciones de su presidente, Francisco Capellán, publicadas en su portal el año pasado.

Capellán asegura que debido a que la mayoría de las panaderías se encuentra en los renglones de pequeñas y medianas empresas, no cuentan con mucha estabilidad.

Se estima que el número de empleos directos que genera el sector es cercano a los 60 mil. Sin embargo, estos datos no son muy exactos, pues no existen estudios que ofrezcan informaciones precisas en ese sentido.