Hoy 
Desde que se firmaron los Acuerdos Comerciales: el primero, el 18 de abril de 1998, donde el país ingresaba como miembro al Mercado Centroamericano; el segundo, el 4 de agosto de 2004, nos integrábamos comercialmente con Centroamérica y Estados Unidos y el tercero, en el 2009, que se logró un acuerdo con la Unión Europea, llamado EPA.
Anteriormente y desde 1984 formamos parte de la Iniciativa de la Cuenca del Caribe, con el Gobierno de los Estados Unidos, donde podíamos enviar nuestros bienes libres de aranceles a ese país. Luego, en 1990 logramos entrar a LOME-IV, que luego se convirtió en COTONOU y más adelante en la EPA, con lo cual se puede acceder al mercado de la Unión Europea.
Lamentablemente los gobiernos y los empresarios han sido tímidos en aprovechar estos convenios comerciales, porque al mismo tiempo los gobiernos castigaban al sector agrícola como sucedió en 1984, cuando el Banco Central le puso un recargo cambiario o impuesto de un 36% a las exportaciones de azúcar, café, cacao y tabaco. El 5 de enero de 1985 la Junta Monetaria puso a flotar el peso dominicano y permitió que el turismo y las zonas francas industriales vendieran sus divisas en el mercado paralelo, donde tenían un margen de beneficio de un 20%; mientras el resto de la economía tenía que seguir ajustándose a las normas del Banco Central.
Las Administraciones Balaguer, Guzmán, Jorge, Balaguer, Fernández, Mejía y Fernández, nunca hicieron un esfuerzo en crear una cultura de exportación, pero tampoco los empresarios del CONEP, Asociación de Industrias, JAD, ADHA y Aproleche no hicieron esfuerzos extraordinarios para lograr exportar, sino que algunos empresarios lograron incentivos especiales con leyes, para beneficios personales; ahí aprendieron de los sindicatos de choferes.
La administración Medina comenzó el 16 de agosto de 2012 y hasta la fecha no hay un plan estratégico para apoyar las exportaciones del agro y la industria. Cuando hacía el Postgrado en Gerencia, nos ponían el ejemplo de Corea del Sur y Taiwán, donde los Presidentes se reunían mensualmente con los empresarios y funcionarios y quien no cumplía con sus metas, era castigado por el Presidente de turno de esos países.
Leído lo expuesto anteriormente, me permito sugerir, que el Presidente Medina haga un programa parecido al de Corea del Sur, supervisando las exportaciones, en los aspectos siguientes:
1. Crear un Comité Ejecutivo Pro-Exportación, presidido por el Presidente e integrado por tres funcionarios elegidos por él y tres empresarios que se irían turnando en las reuniones de trabajo, dependiendo del tema que se vaya a tratar; es decir, área específica del sector agrícola; sector industrial, sector turismo, minería y alta tecnología.
