¿Al que madruga Dios lo ayuda? Lo que dicen las investigaciones

¿Al que madruga Dios lo ayuda? Lo que dicen las investigaciones

En el argot o jerga popular hay un amplio abanico de expresiones que se utilizan frecuentemente, entre ellas “A quien madruga Dios le ayuda”. Resaltando la importancia de pararse de la cama temprano para realizar con éxito todas las tareas del día a día, tanto en la casa como en el trabajo.

No se conoce a ciencia cierta cuál es su origen, pero expertos han comprobado que la expresión “A quien madruga Dios le ayuda” está incluida en ‘El ingenioso hidalgo Don Quijote de la Mancha’. No aparece con las mismas palabras, pero sí refleja el mismo fondo.

En el clásico literario, textualmente la frase aparece en el segundo capítulo y dice: “El que no madruga con el sol no goza del día”.

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Son muchas las personas especialmente exitosas que defienden la idea de madrugar y las ventajas para lograr los objetivos. Bill Gates, Michelle Obama y Elon Musk, entre otros, han confesado que se levantan antes del amanecer.

Este método se popularizó todavía más luego de la publicación del libro “El Club de las 5 de la mañana”, escrito en 2018 por el experto en liderazgo y desarrollo personal canadiense Robin Sharma, quien propone despertarse todos los días a esa hora para aprovechar que “el mundo está en calma”. Y, en parte, tiene razón, pues según un estudio, las personas madrugadoras suelen realizar más actividad física, lo que, sin duda, es bueno para la salud.

No obstante, suelen ser más malhumoradas, pues otras investigaciones aseguraran que quienes se levantan antes de que salga el sol suelen estresarse con mayor facilidad y estar irritables durante el día.

¿Pero qué dice la ciencia sobre esto? Salir de la cama al amanecer para comenzar con las actividades laborales, según registran los estudios, tiene ventajas y desventajas.

Así lo explican varias investigaciones. Un estudio de la Universidad de Westminster de Londres encontró tasas más altas de la hormona del estrés y el cortisol en las personas que se levantaban antes de las 7:21 de la mañana.

Otras de las desventajas según el neurólogo inglés Paul Kelley es que esto afecta directamente a los empleados menores de 55 años, quienes al madrugar están más expuestos a enfermedades mentales y su productividad disminuirá, según una investigación de este especialista.

“Obligar a alguien a trabajar o estudiar tan temprano significa una tortura”, dice.

Además, los madrugadores ocupados a menudo tienen agendas apretadas y pueden ser más propensos a resfriados, jaquecas y dolores musculares, lo que puede afectar su productividad. Algunas investigaciones también sugieren que dormir menos de siete u ocho horas por noche podría reducir los tiempos de reacción y el rendimiento cognitivo.

Por otra parte, un trabajo realizado por científicos canadienses asegura que las personas que se levantan temprano muestran mayores niveles de “afecto positivo” (un índice que incluye elementos como alegría, buen humor, optimismo, entusiasmo y amor), que aquellas que se levantan tarde.

El título del artículo –publicado por la revista de la Asociación Psicológica de Estados Unidos– es “Feliz como una alondra”, pues con el nombre de esa ave, alondra, es como se suele llamar a las personas madrugadoras. A los noctámbulos se les conoce como “búhos”.

Ventajas

1. De acuerdo con un estudio de The Physiological Society, los madrugadores realizan más actividad física, por lo que es bueno para la salud, ya que previene la obesidad o enfermedades cardíacas.

2. Los madrugadores muestran mayores niveles de alegría, humor, entusiasmo y amor. Así lo demuestra un estudio realizado por las científicas Renée K. Biss y Lynn Hasher, publicado por Canadian Institutes of Health Research.

3. En 2008, la Universidad de Texas dio a conocer una estadística según la cual los estudiantes “matutinos” tenían un rendimiento académico significativamente mejor que los nocturnos. Estos resultados se basaron en encuestas a 824 estudiantes, quienes se clasificaron a sí mismos como “matutinos” o “nocturnos” en función de en qué hora del día se sentían más productivos o a qué hora se levantarían o acostarían si carecieran de toda restricción.

4. Las personas que realizan sus actividades desde las primeras horas del día tienen un mecanismo genético que los protege de las enfermedades mentales como depresión, ansiedad o estrés, publica la revista Nature Communications.