LIMA, Perú. El expresidente Alberto Fujimori volvió a solicitar un indulto para salir de la cárcel en que purga una condena de 25 años por delitos de asesinato y corrupción, informó el sábado el gobierno. El exmandatario presentó un “pedido de indulto (que) se tramitará conforme a la Constitución y a la Ley”, según publicó el primer ministro Pedro Cateriano en su cuenta de Twitter.

Al momento el gobierno no ha realizado más declaraciones sobre el tema. La víspera, simpatizantes de su excarcelación marcharon por las calles de Lima vestidos con camisetas blancas y banderas del mismo color que contenían la frase “Fujimori Libertad”. The Associated Press llamó repetidas veces el sábado al celular del abogado del expresidente, William Paco Castillo, en busca de comentarios al respecto, sin obtener respuesta al momento.

Tampoco hubo respuesta en los teléfonos de la comisión de gracias presidenciales del Ministerio de Justicia, el órgano encargado de analizar las solicitudes antes de dar su opinión al mandatario, quien a fin de cuentas es el que decide el indulto. El presidente Ollanta Humala, que culmina su gestión el próximo jueves 28 de julio, rechazó en 2013 el primer pedido de indulto solicitado por Fujimori, de 77 años, por razones humanitarias.

En sus argumentos para respaldar su negativa, Humala dijo que una comisión que estudió la solicitud determinó que Fujimori no tenía cáncer, “no sufría de ninguna enfermedad terminal, grave, incurable o degenerativa, tampoco trastornos mentales graves e incurables”. Fujimori había presentado un pedido de indulto humanitario bajo el argumento de que padecía cáncer en la lengua, pero los médicos descartaron esa posibilidad y determinaron que en realidad se trata de una pequeña lesión recurrente llamada leucoplasia.

El exmandatario ha sido intervenido seis veces desde 1990 hasta 2013 para extirparle las pequeñas lesiones que tiene allí. Ronald Gamarra, abogado defensor de los derechos humanos y exprocurador, afirma que Fujimori tampoco puede ser indultado porque fue condenado por crímenes calificados como de lesa humanidad, por los que el derecho internacional prohíbe recibir indultos. Otra razón para no permitirle salir de la cárcel, añadió, es porque fue condenado por secuestro, un delito que descalifica de cualquier beneficio penitenciario al reo, según una ley peruana que, irónicamente, fue aprobada durante la década del gobierno de Fujimori, de 1990 a 2000.

El presidente electo Pedro Pablo Kuczynski ha dicho repetidas veces que no indultará al exmandatario, pero ha dejado abierto otro camino para que salga de la cárcel: firmar una ley genérica que permita otorgar arresto domiciliario a los presos ancianos, si el Congreso, dominado por el partido fujimorista, propone esta iniciativa legislativa. No ha quedado claro si la solicitud de indulto será atendida por el saliente gobierno de Humala o por el próximo gobierno de Kuczynski. La ley peruana no determina un periodo exacto de tiempo para que se analice y se otorgue o niegue un indulto.

Kuczynski venció en junio en una ajustada segunda vuelta a Keiko Fujimori, la hija del expresidente. Los analistas creen que su gobierno se verá obligado a afrontar a un Congreso dominado por el fujimorismo. El poder de esta corriente política en la legislatura unicameral será decisivo para aprobar leyes claves, por lo que el próximo presidente de Perú tendrá que negociar con sus antiguos rivales electorales. Fujimori está preso desde 2007, cuando Chile lo extraditó. En 2009 fue condenado a 25 años de prisión por su autoría mediata en el asesinato, lesiones graves y secuestro agravado de 25 peruanos ejecutados por un grupo clandestino de militares que actuaron bajo su conocimiento. Tiene otras cuatro condenas por corrupción, y si las cumple todas saldrá libre en 2032 a los 93 años. Kuczynski, también de 77 años, gobernará hasta 2021.