El vicepresidente de la República, Rafael Alburquerque, encabezó anoche el acto inicial de la celebración del centenario del natalicio del líder obrero Mauricio Báez, a quien definió como el precursor del sindicalismo moderno y la clase obrera en el país.
Al pronunciar las palabras centrales del acto, celebrado en el auditorio del Club Mauricio Báez, destacó que el líder sindical supo desatar una huelga en todos gremios azucareros en su tiempo, en 1946, donde dijo surgió el sindicalismo moderno en el país.
Alburquerque estimó, además, que el gran reto de la clase obrera es impulsar una nueva forma de sindicalismo que impulse las reivindicaciones, tal y como lo hizo en su tiempo Mauricio Báez.
El sindicalista fue muerto en el año 1950 en La Habana, Cuba, por el régimen de Trujillo, luego de ser exiliado a esa nación.
La globalización, el cambio del modo de producción y la verticalización de la empresa han puesto a la clase obrera y al movimiento sindical en momentos difíciles, por ello deben surgir otros Mauricio Báez que sepan poner en alto los derechos de los trabajadores ante estos nuevos retos, afirmó.
El historiador Roberto Cassá, director del Archivo General de la Nación, realizó una breve reseña histórica de la vida y obra de Mauricio Báez.
En tanto que Max Puig, ministro de Trabajo, destacó que con la celebración del acto en los locales del Club Mauricio Báez, el Gobierno, unido a las más significativas organizaciones sindicales y sociales del país, le rinde homenaje solemne al líder de la clase trabajadora dominicana de mayor trascendencia.
Las claves
1. Ejemplo
El secretario de Trabajo, Max Puig, dijo que la ocasión era para recordar a Mauricio Báez de los Santos y para exaltar su memoria, destacando su vida y su obra como ejemplo y para los que vivan en estas tierras en los años y siglos por venir.
2. Honra
Al acto asistieron funcionarios civiles y militares y los principales directivos del Club que honra al dirigente sindical.