Todos los días, en los diferentes estadios del Mundial, así como en las principales ciudades de los países participantes, los fanáticos celebran en grande, cuando sus equipos logran las victorias esperadas.

Pero, también se ven caras de sufrimientos, cuando sus colores caen abatidos en las canchas de Sudáfrica 2010. Ya sean los jugadores, ya sean los dirigentes, o ya sean los fanáticos, siempre se va a cumplir la vieja máxima que reza: “el que gana es el que goza”.

El Mundial sigue, y muchos siguen celebrando.  Ayer les tocó a los gringos, alemanes, ingleses y ghaneses..