Organizaciones, partidos y militares de la izquierda revolucionaria alertaron ayer al país a mantenerse vigilante debido a que producto del fracaso de la reciente propuesta de modernización fiscal, el presidente Luis Abinader buscará nuevos recursos vía reajuste y préstamos que también perjudicarán el bolsillo del pueblo.

Así lo expresaron en rueda de prensa realizada en el Colegio Dominicano de Periodistas, dirigentes del Partido Comunista del Trabajo (PCT), el Movimiento Caamañista (MC), Fuerza de la Revolución (FR) y el Referente de la Izquierda Dominicana (RID) integrado por el Movimiento Popular Dominicano (MPD), el Partido Socialista Dominicano (PSD), el Movimiento de Izquierda Revolucionaria (MIR), el Movimiento Revolucionario de Izquierda (MRI), Partido Patria Para Todos (PPT) y varios militantes revolucionarios.

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Ante esta situación, el vocero de los grupos de izquierda, el economista Manuel Colón resaltó que aunque el proyecto de reforma fiscal fue retirado del Congreso, la lucha del pueblo no ha terminado, por lo que hizo un llamado a mantenerse firmes en la defensa de los intereses de los trabajadores, campesinos, la pequeña burguesía, los empobrecidos y demás sectores explotados.

“Llamamos al pueblo dominicano a estar alerta y preparados para la lucha ante la decisión ya anunciada por el presidente Luis Abinader y su Gobierno que procederá a hacer reajustes en el gasto público para garantizar los objetivos económicos y sociales que se han propuesto”, aconsejó Manuel Colón.

A propósito del reajuste, el grupo unitario propuso la reducción de un 75% de los gastos de publicidad del Gobierno, así como los gastos en viáticos y en primera clase a todos los funcionarios públicos.

Entre otras cosas también sugirió la reducción del presupuesto del Congreso mediante la rebaja de los sueldos y compensaciones de los congresistas y la eliminación absoluta del barrilito y el cofrecito.

Asimismo, la eliminación de la evasión fiscal mediante una sustancial mejoría de la administración tributaria y las excenciones fiscales y la suspensión del subsidio que se le otorga a los partidos mediante la Junta Central Electoral.