En Luxor se descubrió un papiro del año 3000 A.C. que indicaba que la embarazada sabía si tendría niño o niña haciendo este ejercicio: a los 3 meses de embarazo orinaba sobre el barro donde luego sembraban trigo y cebada. Si el trigo nacía primero sería varón, y si nacía la cebada primero, sería hembra.
Los egipcios pintaban a los hombres con piel canela y a las mujeres con piel blanca.
El Monte Sinaí, de 2,286 m., es también llamado Jabal Musa, La Montaña de Moisés. Se dice que un monje talló los escalones para subir a la cima, que se conocen como escalones del arrepentimiento, que a mi no me parecen tales porque la mitad de mis compañeros de viaje subió, celebró la Santa Misa a la salida del sol; llegaron muertos de cansancio, pero resplandecientes de satisfacción, nada de arrepentimiento; arrepentida estoy yo ahora por no haber subido. El resto nos quedamos en vigilia.
El monasterio de Santa Catalina, al pie del Sinaí, donde vimos el lugar de la Zarza Ardiente, donde Dios habló a Moisés, tiene la segunda más admiradacolección de manuscritos después del Vaticano; la mayoría de ellos en griego y copiados por monjes. En 1844, Friedrich von Tischendorf, descubrió allí el Codex Sinaiticus una de las más antiguas copias de la Biblia, del siglo IV.
Beduino significa habitante del desierto, se les llama así por el área donde viven, que se llama Badía, un desierto semiárido.
El Monte Nebo, lugar donde Moisés vio por última vez la Tierra Prometida, se vendió a la Orden Franciscana en 1933, por un precio simbólico, para que lo custodiara y cuidara.