El Cristo  Redentor en el cerro de Corcovado en Rio de Janeiro, Brasil, surgió con motivo del 100 aniversario de la independencia del Brazil, proyecto ganador en un concurso para crear un monumento conmemorativo.  Está construido de concreto revestido de mosaicos de piedra pómez.  Pesa 1,145 toneladas, con una altura de 30 metros el cuerpo y 8 metros la base, en el tope del Corcovado, de 710 metros de altura.  Recibe más de 600,000 visitantes al año.  En su corona se colocó un pararrayos.

Rio de  Janeiro debe su nombre a que cuando llegaron los portugueses a colonizarlo en el mes de enero, creyeron que la bahía de Guanabara era un rio grande, de ahí procede Rio de Janeiro.

Me llamó  mucho la atención en la ciudad de Rio de Janeiro que los muchachos que piden limosna en los semáforos, mientras dura la luz roja, motivan a los donantes ofreciendo un show de malabarismo.  Vimos actos con pelotas, bolos, palitos, patines  y skateboard.

El nombre  de la montaña   Pan de Azúcar, en la ciudad de Rio, se le adjudica a que en el Siglo XIX los portugueses utilizaban unos contenedores con forma muy similar a la forma del morro, donde guardaban y acarreaban la melaza que llevaban hacia Europa.  También se dice que deriva de “Pau-nh-acuqua» que significa “la alta colina” en la lengua Tupi-guaraní, usada por los indígenas Tamoios

En 665 metros  cúbicos  por segundo se calcula el volumen de agua que  cae de las Cataratas del Iguazú.  El rocío que produce la caída de “La Garganta del Diablo” puede llegar hasta 7 kilómetros de distancia.  Es un espectáculo maravilloso de la naturaleza.