La ciudad  de San Petersburgo está construida sobre 42 islas, la cruzan 65 ríos y canales, tiene 300 puentes de los cuales 21 son levadizos, todos sobre el río Neva.

La segunda  esposa de Pedro el Grande era la lavandera de casa de un amigo donde la conoció y se enamoró.  Al casarse con el Zar, se convirtió en Catalina I.

En la  isla más pequeña de todas, Pedro I mandó a construir la fortaleza de San Pedro y San Pablo, donde se encuentra la Iglesia del mismo nombre.  Es aquí donde  están las tumbas de la familia Romanov, últimos de la realeza rusa asesinados por los bolcheviques.

Los famosos  huevos Fabergé tuvieron su origen en los pedidos que hacía el Zar Alejandro I  de Rusia para regalarlos  a su familia con motivo de la Pascua.

La palabra   Zar  procede de  Cesar.

Los  apellidos rusos siempre se feminizan cuando se aplican a las mujeres, poniéndoles una “a” al final.

Los  abedules   son los árboles que tienen los troncos blancos y que  son tan comunes en Rusia.

La expresión  “llueven perros y gatos” procede de que en la Edad Media se criaban animales  en las vigas de los techos de las casas,   como gatos, ratas, perros y otros.  Cuando llovía, el agua que se colaba forzaba a los animales a salir.

También  en la Edad Media, el ritual de los pocos baños que se daban era en una bañera grande con agua caliente.  Primero en tomarlo era el padre, luego otros hombres de la familia, luego las mujeres, los niños y por último los bebés,   que utilizaban el agua   oscura de  sucio.