Algo De Todo

Algo De Todo

Elsa Ramírez de Miura

El pasado lunes quedó mutilado el último párrafo de la columna sobre las expresiones que siguen al estornudo. Lo repito completo: En la antigüedad se creía que a través del estornudo los malos espíritus o enfermedades podían entrar al cuerpo, por lo que al estornudar se exclamaban frases de protección.

Los griegos decían “Que Júpiter te conserve” o “Zeus te salve”; los romanos exclamaban “Salve” y tras la llegada del cristianismo se le agregó al estornudo un elemento diabólico y para evitar que se metiera en el cuerpo se apresuraban a decir “Jesús”. Para alejarse de conceptos religiosos, se generalizó la palabra “salud”. Nosotros aquí también decimos “Dios te bendiga”.

En el 1962, dos genios del ritmo bossa nova, Vinicius de Moraes y Antonio Carlos Jobim, en sus acostumbradas reuniones en el Bar do Veloso, en Ipanema, Brazil, se inspiraron en una jovencita que acostumbraba a pasar por allí para escribir una de las canciones más interpretadas de la historia, “Garota de Ipanema” o “La Chica de Ipanema”.

La famosa chica de Ipanema se llama Heloísa Eneida Menezes Paes Pinto, conocida como Helo Pinheiro, quien declaró que escuchaba los piropos de ambos galanes, pero hacía caso omiso.

Confesó que tuvo que acelerar su boda para calmar los celos de su novio cuando se hizo público que ella era la chica de la canción que fue presentada por primera vez el 2 de agosto de 1962 y que al poco tiempo ya era un éxito mundial.

En el 2001, los herederos de Vinicius y Jobim presentaron una demanda contra Heloísa por explotar comercialmente el nombre de “Garota de Ipanema”, nombre que lleva su tienda de ropa. Aún existe en Ipanema, el bar donde los compositores se reunían pero lógicamente ahora se llama “Garota de Ipanema”.