El 16 de julio de 1838, se fundó en Santo Domingo, el movimiento clandestino independentista “La Trinitaria”, fundado por Juan Pablo Duarte.
La construcción de la Torre Eiffel, aunque se le atribuye en su totalidad a Gustav Eiffel, no es la realidad, debe darse crédito al cubano Guillermo Pérez Dressler, un dato muy poco conocido porque nunca se le dio el mérito que merecía.
Guillermo Pérez Dressler, mejor conocido como Guillaume Dressler, nació en Guanabacoa, Cuba, en 1860. Estudio arquitectura en la Universidad de La Habana, pero al morir su padre, abandonó los estudios y se puso a trabajar como aprendiz de boticario. Uno de sus profesores, convencido del gran talento que tenía, le consigue una beca para estudiar en La Sorbona de París y así llega a Francia con 16 años, donde se gradúa de arquitectura con honores a la edad de 21 años.
De inmediato lo contrata la firma Dumouriez, Valmy et Freres, siendo el responsable de importantes obras. Luego pasa a Munich donde realizó grandes construcciones. De regreso a París, uno de sus profesores de La Sorbona le presenta a Gustav Eiffel quien buscaba un asistente para la construcción de la torre.
Ya ciudadano francés, se convierte en la mano derecha de Eiffel y lo nombra administrador ejecutivo de la obra, permitiéndole diseñar una cuarta parte de la torre.
Eiffel padecía de vértigo por lo que jamás subió más alto que el primer piso de su famoso proyecto, dejando a Dressler responsable y supervisor de la obra hasta finalizada.
En 1889, Dressler es llamado a Inglaterra por la Reina Victoria, para la edificación del Victoria and Albert Museum and Gardens y embarcó en el HMS Forepina. El barco naufragó en una tormenta sobreviviendo solo 4 personas y Dressler no fue uno de ellos. Su cuerpo jamás fue hallado, muriendo también su aporte a la construcción d