En 1844 la función educativa estuvo a cargo del Ministerio de Justicia e Instrucción Pública. Luego la Ley 89 de 1931, asignó las competencias de instrucción pública y bellas artes a la Superintendencia General de Enseñanza. En 1934 una nueva ley, la 786, creó la Secretaría de Educación, Bellas Artes y Cultos.
Con la promulgación de la Ley No. 66-97 de 1997 la Secretaría cambia nueva vez de nombre y de competencias a Educación y Cultura. Finalmente la Ley 41-00 del 2000, instituyó una Secretaría de Cultura autónoma.
Desde 1844 al 2020 acontecieron cuatro reformas, esta gestión de gobierno impulsaría la quinta modernización del Estado. Así debería asumirse este proceso por los gestores de la cosa pública, en especial desde el Ministerio de Administración Pública (MAP).
La historia del Estado dominicano impone una alianza entre educación y cultura. Donde teatros, academias de bellas artes, museos, centros, casas de arte y demás edificios sean enfocados como escuelas culturales que además de rehabilitarse físicamente, tenga una nueva institucionalidad. Una figura legal es lo que hace hoy.
El Presupuesto 2021 es la primera oportunidad concreta para que Luis Abinader y Raquel Peña continúen la reforma del Estado. El Ministerio de Educación tiene asignado para 2021 unos RD$ 194,510, 200 millones que representan 21% de 947,511,158 millones del presupuesto.
Sin embargo, Cultura apenas posee RD$ 2,587,888,533 (1.3%). Consideramos que al menos 2,000 millones pesos de educación pudieran utilizarse para remozar edificaciones culturales, enfocadas como “escuelas de cultura”.
En Santiago, el Ministerio de Educación no necesita construir más escuelas de las 89 nuevas edificadas en la provincia. Hoy se impone invertir en equipamientos culturales que se encuentran en franco deterioro físico, y tecnológico. El Plan Estratégico de Santiago estima 350 millones de pesos para 10 edificaciones culturales desde el Gran Teatro, Monumento a los Héroes, Amantes de la Luz hasta Casa de Arte.
Apelamos por un Estado eficiente que reduzca el número de estructuras y empleados. Que armonice tamaño, competencia y gasto público. El sector público sobrepasa los 650 mil empleados.
Este total representa 28.5% del empleo formal de 2,226,338 de empleados que cotizan a tesorería.
En las provincias del Cibao Norte, el total de empleados privados y públicos es de 864 mil, casi la misma cantidad de empleados públicos nacionales, la mayoría de los cuales se concentran en Santo Domingo y su entorno.
Creemos que una alianza estratégica y concurrente entre ministerios de Educación y Cultura es la señal que se espera en este 2021 para avanzar en el logro de un Estado moderno con gasto público focalizado y eficiente, que se concentre en zonas exitosas de animación y producción cultural, industrias creativas y agropecuaria de marca territorial como Santiago y el Cibao.