La diabetes y sus complicaciones representan 4.2 millones de muertes en todo el mundo. En la República Dominicana, la prevalencia de diabetes representa el 11%. Las complicaciones con la mayor tasa de mortalidad ocurre en aquellos con un control inadecuado de su condición, lo que hace necesario la educación constante en la prevención y manejo adecuado de la misma.

La diabetes tipo 2 tiene factores de riesgos para su desarrollo como son: historia de diabetes en un familiar directo, obesidad, sobrepeso, diabetes gestacional, entre otros. Lo más destacable es que ésta es una condición completamente prevenible.

La estrategia de prevención es la reducción de peso que según las guías de la Asociación Americana de la Diabetes, debe ser un 7% del peso inicial e incluir una actividad física de moderada a intensa de por lo menos 150 minutos/semana (Ej.caminar rápido). En personas con diabetes, la pérdida requerida es de 7-10% del peso inicial. Esta pérdida de peso debe ser progresiva y sostenida por al menos 1 año con una reducción de 1-2 libras/semana. Para lograrlo se recomienda reducir 500-1000 kilocalorías/día. Se debe considerar visitar un nutriólogo para que le asista en el plan adecuado para sus necesidades. Otra estrategia es usar aplicaciones móviles o listados de alimentos para ayudarnos a determinar el contenido de los nutrimentos de los alimentos.

Para las personas con diabetes tipo 1, la recomendación nutricional es aprender a determinar el contenido de hidratos de carbono y ajustar la cantidad de insulina según este contenido, edad, comorbilidades y actividad física. Esto requiere un trabajo multidisciplinario con el especialista en nutriología, diabetología y endocrinología. El manejo nutricional en diabetes tipo 2, más que una dieta “especial” para la condición, se enfoca en reducir las porciones de alimentos, incluir verduras no almidonadas en los platos principales (lechuga, tomate, repollo, ajíes, etc), reducir la cantidad de azúcares y harinas en la dieta, elegir alimentos enteros en lugar de los procesados, escoger carnes magras y sin salsas. Es recomendable aumentar el consumo de grasas saludables como aceites verdes, aguacate, nueces sin azúcar y aceitunas. Actualmente se consideran aceptables planes bajos en hidratos de carbono, dietas veganas y mediterránea. Para una prevención sostenible, es necesario incluir a toda la familia en estos cambios de estilo de vida. Esta columna es la sección educativa de la Sociedad Dominicana de Nutrición Clínica y Metabolismo. Escribe tus preguntas a: sodonuclim@gmail.com / @sodonuclim.