POR GERMAN MARTE
La Asociación de Industrias de la República Dominicana (AIRD) considera que el gobierno se excedió e hizo un «sobreajuste» económico, por lo que demandó una revisión de las medidas económicas adoptadas por las autoridades para salir de la crisis, y que a su juicio afecta la competitividad de su sector.

De acuerdo con Yandra Portela Vila, presidenta de la AIRD, las autoridades habían previsto la posibilidad de un déficit fiscal de RD$6 mil millones, de septiembre del 2004 a marzo del 2005, pero al 31 de diciembre del año pasado el déficit estaba en RD$3 mil doscientos millones, «y el gobierno ha planteado que definitivamente ha tenido un superávit».

Entonces, concluyó, si lo que se tenía previsto era un déficit y lo que se tiene es un superávit, significa que ha habido un sobreajuste fiscal.

Lo mismo con el Banco Central, añadió, pues ha habido una limitación de la emisión monetaria de 11.2%. «Ahí están los números que indican que ha habido un reajuste fiscal», recalcó la presidenta de la AIRD.

Dijo que una cosa es tener la meta de lograr un equilibrio y otra distinta es que lo exceda.

VORACIDAD FISCAL

Cuando la Autoridad Portuaria dijo que iba a aumentar la tarifa, la AIRD se preguntó si habría una segunda reforma que ellos desconocían, porque además el IDSS también estaba diciendo que tenía que aumentar, además estaban cobrando unos sellos adicionales para las exportaciones hacia Haití, todo por vía administrativa.

«Se habían tomado una serie de medidas administrativas que venían siendo como un paralelo, de que no sólo habíamos incrementado los impuestos debido a la reforma fiscal de agosto, sino que además estábamos teniendo un montón de medidas administrativas e incrementando los costos que tenemos para adquirir los servicios del gobierno», afirmó Portela.

A eso se agrega, observó Campos de Moya, el anuncio del secretario de Turismo de un impuesto de 5% a los pasajes aéreos, el impuesto a la propiedad de un uno por ciento, mucho más elevado que otros países con los cuales tenemos relaciones, «todo eso es parte del grito del sector empresarial».

Asimismo, indicó que el aumento al ITEBIS combinado con el aumento al recargo cambiario pone al país con una pérdida de 32% en su capacidad de competencia frente a los países que forman parte del DR-CAFTA (Tratado de Libre Comercio de Centro América y República Dominicana con los EEUU). «Eso es parte del grito que tiene el sector empresarial», dijo.

Los gritos vienen, prosiguió a su vez Ligia Bonetti, porque el sector empresarial lleva algún tiempo proclamando que República Dominicana tiene que ser competitivo, pero hace cinco años que el país firmó un Tratado de Libre Comercio con Centroamérica, «y no somos capaces de ser competitivos por la situación que vive el sector productivo».

Subrayó que solamente para traer una maquinaria al país y generar empleos, y producir productos para exportación, hay que pagar un 32%.

Bonetti adujo que sus reclamos son para que el gobierno, los legisladores y todos los sectores que tienen que ver con el asunto entiendan que para el país poder seguir firmando

acuerdos de libre comercio, como marca la tendencia, «debemos organizarnos para ser competitivos».

Empero, aclaró que el sector industrial no pide que le den ningún incentivo, ni que le regalen cosas, simplemente reclaman equidad.

De hecho, dijo, el sector industrial necesita las condiciones de equidad, con o sin TLC.

Advirtió que si el país no toma en serio el déficit comercial que tiene con Centroamérica no podrá seguir adelante.