BARCELONA (AP).- Fernando Alonso correrá este fin de semana en el Gran Premio de su natal España exhibiendo por primera vez el número uno en su bólido, señal de su condición de monarca de la Fórmula Uno. Pero en el autodrómo de Cataluña tiene una obligación: convertirse en el primer piloto español en ganar la carrera, que se disputa desde 1951.

Alonso, quien el año pasado se convirtió en el piloto más joven y el primer español en coronarse campeón de la F1, ha figurado segundo en Barcelona en dos de los últimos tres años.

La «Alonsomanía’’ se vive en toda España, donde más de 115.000 se hicieron presente al gran premio del año pasado. Y los españoles siguen aumentando la capacidad del circuito catalán de Montmeló.

Alonso asegura que la presión de competir en casa no le afecta.

«Creo que la presión viene cuando uno no rinde al máximo y entonces eso te pone a pensar demasiado. En mi caso, sin embargo, siempre doy el máximo, ya sea un test o la carrera, en Barcelona o cualquier otro lugar’’, declaró Alonso.