El presidente de la Federación Dominicana de Comerciantes (FDC) declaró que los altos intereses bancarios, que alcanzaron hasta el 55%, fue uno de los factores que más influyó en el decrecimiento del pequeño y mediano comercio el recién pasado año.

Iván de Jesús García sostuvo que la crisis bancaria que se originó en el país en el 2003, al restarle credibilidad al sistema financiero, lesionó de manera significativa la actividad comercial.

Resaltó que a raíz de esta situación, los bancos duraron prácticamente tres o cuatro meses sin hacer nuevos desembolsos para los préstamos del sector comercio y que todavía los créditos se mantienen semiparalizados al sector comercio.

Con relación al 2003, lo calificó como uno de los años más difícil en toda la historia del comercio dominicano, porque el pequeño y mediano comercio se descapitalizó, según añadió, a causa de las alzas de precios de todos los artículos que se venden en los establecimientos del comercio organizado.

Como ejemplo, De Jesús García citó que el comercio que tenía al inicio del 2003 un capital de RD$500,000, hoy cuenta con sólo RD$250,000, tan sólo un año después.

Sostuvo que el factor principal que causó la pérdida de capital del pequeño y mediano comercio, es el alza desproporcionada de la tasa de cambio del dólar estadounidense.

Un alza de la prima del dólar de más de ciento por ciento, como ocurrió el año pasado, es un grave problema para todo el sistema económico del país, incluido el comercio, el gobierno y la industria, dijo.

Otro problema que lesionó el desenvolvimiento en la actividad comercial, según De Jesús García, fue la crisis de la energía eléctrica, ya que el comercio se vio afectado por los prolongados y constantes apagones y por la alta tarifa, dijo.

Sostuvo que muchos pequeños y medianos negocios colapsaron durante el 2003, a causa de las altas facturaciones de electricidad.

Citó también como elemento dañino para el comercio el pasado año, el incremento de la comisión cambiaria de 4.75 a 10%, así como el 2% de recargo impositivo a las importaciones.

El presidente de la FDC señaló que nunca en la historia nacional, el sector comercial había sido tan afectado por los impuestos como el pasado año.

En cuanto a las expectativas del comercio para el 2004, consideró que éstas están supeditadas al acuerdo a que arribe el gobierno con el Fondo Monetario Internacional (FMI).

Con relación a las proyecciones de impuestos para sustentar el Presupuesto Nacional del 2004, dijo que se trata de gravámenes inflacionarios para toda la población.

Sostuvo que el 2004, además de ser un año de elecciones presidenciales, será un período difícil para la economía del país.

Al respecto, argumentó que si se aprueban los impuestos que están en la agenda legislativa, se produciría una nueva recesión en el sector comercial durante los primeros cuatro meses del 2004.

Abogó porque el gobierno logre firmar el acuerdo con el FMI, sin que ello implique un compromiso impositivo que afecte de manera significativa la economía popular.