BUENOS AIRES (AFP).- Un adolescente de 15 años provocó una masacre el martes en su colegio al matar a tres compañeros y herir a otros cinco con un arma de guerra en una pequeña ciudad del sur de la provincia de Buenos Aires, según fuentes médicas y educativas.

   Sandra Núñez, Evangelina Miranda y Federico Ponce, de entre 15 y 16 años, murieron en el aula, bajo las balas de una pistola 9 milímetros de las fuerzas de seguridad, con la que el agresor ingresó al colegio donde cursa estudios en la habitualmente tranquila ciudad de Carmen de Patagones, 920 km al sur de la capital.

   «Doloroso, doloroso, tremendo», dijo el presidente Néstor Kirchner a la prensa al comentar esta masacre que no tiene precedentes en Argentina.

   Tras informar erróneamente que una cuarta adolescente había fallecido en el hospital por las heridas recibidas, la dirección general de Educación  de Buenos Aires de admitió en un comunicado su equivocación y precisó la cantidad de tres víctimas fatales.

   La información sobre la supuesta muerte de una cuarta alumna había sido ratificada además por el secretario de Salud de Patagones, Alejandro Villamur, pero negada por fuentes médicas de ambos hospitales involucrados, lo que generó una confusión informativa.

   La médica Silvia Ocampo, vocera del hospital Pedro Ecai de Carmen de Patagones, confirmó en rueda de prensa que hubo tres muertos y cinco heridos, todos ellos en el sector de cuidados intensivos.

   La portavoz aclaró que dos de los heridos están en «estado reservado», y debieron ser derivados al hospital de la vecina ciudad de Viedma, de mayor complejidad.

   El inédito episodio ocurrió cuando el joven agresor -de nombre Rafael- ingresó al colegio «Islas Malvinas», donde cursa el nivel medio, con un arma que le habría sacado a su padre, un oficial de la Prefectura Naval, informó el comisario Eduardo Diego, de la policía local.

   El estudiante ingresó a la escuela a las 07H30 local (10H30 GMT), después de la ceremonia de izamiento de la bandera, fue hasta su aula, donde los alumnos esperaban la llegada del profesor, y en un instante desató la tragedia, según testimonios de compañeros.

   «No medió ningún tipo de agresión ni intercambio de palabras. (El joven) trajo el arma, entró al aula, empezó a disparar contra la pared, sin decir nada. Y cuando unos profesores le empezaron a preguntar qué estaba haciendo, bajó el pulso y disparó contra los chicos refugiados debajo de los pupitres», contó el comisario.

   Según un estudiante testigo, el joven siguió disparando luego en el pasillo hasta que arrojó la pistola. El joven llevaba además un cuchillo.

   Tras el episodio, el agresor fue arrestado cuando salía de la escuela. Se entregó «en estado de shock y sin pronunciar palabra», dijo el comisario.

   El joven fue trasladado a la cercana ciudad de Bahía Blanca, donde quedó a disposición de la jueza de menores Alicia Ramallo, quien advirtió que «los menores de 16 años son inimputables cualquiera sea el hecho».

   Rafael era «un alumno con buen rendimiento escolar, pero con muchas dificultades para integrarse al grupo» y aseguró que «se lo caracterizaba más por la timidez que por la violencia», dijo Mario Oporto, director general de Cultura y Educación de Buenos Aires.

   «Esto es un caso que sobrepasa todos los límites de la violencia que uno puede esperar», dijo a la radio Continental.

   De su lado, Villamur indicó que el joven era objeto de burlas de sus compañeros y que «él se sentía diferente a los demás. Escuchaba otro tipo de música, se identificaba con una onda metálica y se vestía de negro».

   Se trata de un hecho inédito en Argentina, donde las escuelas no están exentas del creciente clima de violencia social, pero nunca se había generado una masacre entre alumnos.

   «Es el primer hecho que sucede en una magnitud de este tipo en Argentina», declaró la subsecretaria bonaerense de Educación, Delia Méndez quien sostuvo que se trata de un caso «aislado».

   Rafael era alumno de la escuela »Islas Malvinas», un establecimiento estatal de doble escolaridad, ubicado en un barrio de clase media de la zona céntrica de la ciudad, y uno de los dos colegios secundarios más importantes de Carmen de Patagones, según la prensa local.