POR SOILA PANIAGUA
Los servicios a domicilio que ofrecen los colmados a sus  clientes se han encarecido por efecto del alza de los combustibles, a lo que se suma el riesgo que corren los motomensajeros por el auge de la delincuencia.

De acuerdo a la Federación Nacional de Comerciantes Detallista de provisiones (FENACODEP), esa situación puede afectar negativamente la actividad de esos establecimientos, cuyas ventas a domicilio representan, en muchos casos, un mayor porcentaje que las ventas directas en el propio establecimiento.

“Tenemos tres problemas que se juntan ahí. Uno es que se nos ha aumentado el combustible para el motor que usamos; dos, está en riesgo el motorista porque deja el motor en la calle para subir hasta un cuarto piso a llevar la mercancía y cuando regresa fácilmente no encuentra el motor y tres, puede hasta perder su vida por la oscuridad”, expuso Fausto Figuereo, ex presidente de esa entidad.

Ante esa situación, los propietarios de colmados son los que cargan con el mayor peso, dijo Figuereo, quien participó en el Encuentro Económico de Hoy junto Sergio Santana, presidente de FENACODEP; José Matos y René Japa.

“El consumidor, el cliente no quiere salir, primero, para economizarse riesgo, tiempo y combustible. Para ellos es mejor llamar por teléfono para que les lleven el producto”, explicó Figuereo.

Dijeron que ese servicio se usa de manera masiva, al extremo de que hay colmados en áreas que tienen dos y tres motores para cubrir la demanda de sus clientes.

Comentaron que a pesar de que ese servicio tiene un costo para el dueño del colmado, al cliente que pide el producto a domicilio no se le puede cobrar más caro.

Indicaron que si el precio de los combustibles, las piezas de los motores e inclusive, la mano de obra, siguen subiendo, el servicio a domicilio o delivery, será insostenible para los dueños de colmados.

La masificación de ese tipo de servicio en los colmados ha obligado a los propietarios de esos establecimientos a aumentar la cantidad de empleos, de manera que alguien atienda o reciba las órdenes de pedido en el negocio y otro se encargue de distribuirlo, porque la gente no quiere comprar donde no le llevan las mercancías a domicilio.

Explicaron que esa situación choca con la que se producía anteriormente, cuando la gente iba al colmado a comprar y esos negocios apenas empleaban una o dos personas.

“Ya no se puede tener una sola persona en el colmado, porque ahora más del 60% de las ventas son a domicilio, por lo que se necesita obligatoriamente más personal y motocicletas”, puntualizó Santana.

Indicó que  el servicio a domicilio es parte del interés en satisfacer las exigencias del consumidor en medio de una creciente competencia a todos los niveles, donde se pone el negocio más cerca del consumidor.