JERUSALEN (AFP).- Israel amenazó el viernes con volver a sus operaciones de asesinato selectivo contra dirigentes del Movimiento de Resistencia Islámica palestino (Hamas), en particular contra su jefe espiritual, el jeque Ahmed Yasin, quien desmintió estar implicado directamente en el atentado suicida del miércoles.

«El jeque merece la muerte y le aconsejo entrar a la clandestinidad», afirmó el viceministro de Defensa israelí Zeev Boim, citado por la radio militar.

Según esta emisora, los responsables militares israelíes estiman que el jeque Yasin ordenó personalmente el atentado del miércoles, perpetrado por una joven palestina que hizo estallar la carga que llevaba en Erez, el principal paso entre la franja de Gaza e Israel, matando a cuatro israelíes.

No obstante, el jeque Yasin desmintió toda implicación directa en este atentado.

Los israelíes «saben que el jeque Yasin no tiene nada que ver con la acción militar, pero buscan un pretexto para tranquilizar a su pueblo y esconder su fracaso», declaró el jeque Yasin a periodistas en Gaza.

«Las amenazas de muerte no nos dan miedo, pues buscamos el martirio», agregó.

El jeque Yasin se había congratulado por el ataque de Erez y por el hecho de que, por primera vez, fuera llevado a cabo por una mujer del Hamas.

«Las operaciones continuarán y corresponde a las Brigadas Ezzedin Al Qassam (brazo armado del Hamas) y a los otros brazos armados determinar el momento y el lugar», había prevenido.

Al ser interrogado por la radio militar, el general de reserva Amos Gilad, cercano consejero del ministro israelí de Defensa Shaul Mofaz, rechazó precisar si el jeque Yasin constituía un nuevo objetivo.

«Nunca debemos anunciar nuestras intenciones», afirmó el general Gilad, quien sin embargo calificó al jeque Yasin de «jefe supremo del crimen».

«Utilizaremos todos los medios necesarios para atacar al terrorismo», agregó el general Gilad. El militar adjudicó la relativa calma por parte de los palestinos que prevaleció a fines del año pasado a la «liquidación parcial de la dirección del Hamas».

Antes del atentado de Erez, el ejército israelí se había abstenido durante más de tres meses de atacar a los dirigentes políticos del Hamas. Pero las operaciones contra los responsables militares de esta organización se reanudaron el 30 de diciembre, cuando uno de los jefes de las Brigadas Al Qassam fue muerto en la franja de Gaza.

El último intento de asesinar a un jefe político del Hamas tuvo lugar el 10 de septiembre. En esa ocasión, Mahmud Al Zahar resultó herido cuando la aviación israelí bombardeó su casa, matando a dos personas.

El 6 de septiembre, el jeque Yassin fue blanco de una tentativa de asesinato selectivo por la aviación israelí, resultando levemente herido en una mano cuando fue bombardeado el edificio en Gaza donde se encontraba con otros dirigentes del Hamas.

Por otra parte, el gobierno israelí debe decidir el domingo sobre la táctica que debe adoptar frente a la Corte Internacional de Justicia (CIJ) que debe comenzar sus audiencias el 23 de febrero en La Haya, acerca del muro de separación que Israel levanta en Cisjordania, indicó la radio pública.