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EL CAIRO (AP).- Un canal de televisión árabe transmitió ayer imágenes de una reportera estadounidense secuestrada en Irak junto con un comunicado en que los secuestradores amenazan con matarla a menos que todas las mujeres prisioneras en Irak sean liberadas en 72 horas.
El video muestra a Jill Carroll, de 28 años, periodista independiente que reportaba para el diario The Christian Science Monitor.
El canal de televisión, Al-Yazira, se negó a decirle a la AP de quién recibió la cinta, pero emitió un comunicado exhortando a la liberación de la reportera.
Un productor de la red dijo que la grabación fue recibida el martes. El productor dijo que no se había incluido el nombre del grupo armado que secuestró a Carroll en el mensaje enviado a la emisora con la grabación.
En el vídeo se observa a Carroll sentada delante de una tela blanca y hablando, pero su voz no se escucha. Luce pálida y cansada. Su cabello largo, castaño, está atado hacia atrás con raya al medio.
La reportera fue secuestrada el 7 de enero en uno de los barrios más peligrosos de la capital. Hombres armados emboscaron su automóvil y mataron a su traductor poco después que abandonó las oficinas de un político suní.
El Christian Science Monitor publicó un comunicado de la familia pidiendo la liberación de la reportera.
«Jill es una periodista inocente y respetuosamente les pedimos que por favor muestren piedad y le permitan regresar a su hogar, a su madre, a su hermana, a su familia, dice la declaración. «Jill es amiga y es hermana de muchos iraquíes y se ha dedicado a a llevar al mundo la verdad sobre lo que pasa en Irak. Pedimos el regreso rápido y seguro de nuestra querida hija y hermana.
El Departamento de Estado dijo que hacía todo a su alcance para lograr la liberación de la joven.
«Continuamos realizando todos los esfuerzos posibles, trabajando con iraquíes y con otros, para que la señorita Carroll regrese sana y salva dijo el portavoz Sean McCormack.
El Christian Science Monitor, con sede en Boston, dijo el sábado que continuará «explorando todas las posibilidades para lograr su liberación.
El ejército de Estados Unidos allanó una prominente mezquita suní un día después del secuestro de Carroll, causando una protesta de centenares de feligreses. Un oficial del ejército estadounidense dijo que el allanamiento había sido una respuesta necesaria ante el secuestro, tras recibir una pista de un ciudadano iraquí.
Los insurgentes en Irak han secuestrado a más de 240 extranjeros desde la invasión de Estados Unidos y han asesinado al menos a 39 de ellos.
