LA HABANA. AP. La organización Amnistía Internacional (AI) exhortó ayer a las autoridades cubanas a liberar a los presos políticos, mientras intelectuales cubanos se pronunciaron en defensa de lo que llamaron «una democracia propia» sometida a las presiones de una campaña mediática en su contra.    En un comunicado la organización AI pidió además al presidente Raúl Castro que invite a expertos de Naciones Unidas y de grupos independientes de derechos humanos para monitorear la situación en la materia.

Tal como lo hizo constar la propia AI, su llamado coincide con el séptimo aniversario del encarcelamiento y posterior envío a los tribunales en 2003 de 75 disidentes condenados penas de hasta 28 años de cárcel bajo cargos de traicionar a la patria y recibir dinero de Estados Unidos y grupos de interés extranjeros contrarios a la revolución.

Unos 21 de esos opositores fueron posteriormente liberados por motivos de salud y uno de ellos salió por haberse cumplido su sentencia.    «Las leyes cubanas imponen límites inaceptables a los derechos de liberta de expresión, asociación y reunión» dijo  Kerrie Howard, vicedirector de Américas de la AI.    «Las largas prisiones de individuos por haber ejercido de sus derechos no sólo es una tragedia en si mismo, sino  constituye un escollo» para un  diálogo» con EU”.

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Contra las Damas de Blanco

Unos 150 partidarios del Gobierno cubano se manifestaron ayer en La Habana contra 22 Damas de Blanco, familiares de 75 opositores condenados en 2003, que protagonizaron una marcha de protesta en el séptimo aniversario del encarcelamiento de esos disidentes. La contramanifestación oficialista, llamada en Cuba «acto de repudio», tuvo lugar a lo largo de unos dos kilómetros por calles del centro de La Habana.