Los famosos tienen por lo general hábitos que rayan en la excentricidad. La mayoría de las cosas las viven al extremo y en demasía: si beben, si bailan, si gustan ir a la playa… y ¡si aman también! Si no es así, encuéntrele explicación a los besos desaforados entre Eva Mendes y su perro en medio de una reunión con un amigo… Es mucho ¿no?

Tal vez para usted, pero para Paris Hilton, quien toma primero a su chihuahua Tinkerbell antes que la cartera para salir a la calle, sería algo de lo más normal. Esas escenas las repiten otras celebridades que aman los perros, como la actriz Denise Richards quien  promueve el rescate de mascotas y  no le pesa plantarle tremendo ósculo al can más feo.

A Kim Kardashian no le gustan mucho los perros, pero se atrevió a darle un tierno beso a un cerdito en el cumpleaños de un sobrino. Tan osados como ella son los actores Will Smith y Kellan Lutz que se dan besos “mojados” con sus respectivos perros.

La lista de quienes hacen lo mismo es larga porque tener una mascota y salir a presumir de ella se ha convertido en una moda casi obligatoria para las celebridades. Muchos de ellos, como Nicole Richie han sido duramente criticados por su afición por los denominados “perros de cartera”, de los cuales se dice que son sólo utilizados como objetos y maltratados por dueños que no tienen ni idea de cómo cuidarlos.