Golpeada por la dimisión de Pablo Iglesias, que deja la política, pero también por la debacle socialista

La contundente victoria de la derecha conservadora en las elecciones regionales de Madrid ha puesto en alerta a la izquierda española, duramente golpeada por la dimisión de Pablo Iglesias, que abandona la política, pero también por la debacle socialista, que no logró liderar el objetivo de un cambio en el Gobierno autonómico ni frenar a la ultraderecha.

En unos comicios con una participación histórica de más del 76 %, el Partido Popular obtuvo 65 escaños (35 más que en 2019), la izquierda representada por Más Madrid y PSOE empataron a 24 y Unidas Podemos pasó de 7 a 10, mientras que la ultraderecha (Vox) sumó uno hasta 13.

Los peores resultados fueron para la ya casi extinguida formación liberal Ciudadanos, que de ser la segunda fuerza política en el Parlamento regional pasó a no tener representación.
Tras la larga noche electoral, todas las formaciones reunieron a sus Ejecutivas – a excepción del Partido Socialista (PSOE) que lo hará hoy-, para valorar si realmente los resultados de ayer pueden ser extrapolables a nivel nacional, como proclama el PP, y si afectarán a la coalición de izquierdas gobernante.

Desde el Ejecutivo presidido por Pedro Sánchez, los socialistas reconocen la debacle del partido en Madrid, pero no creen que la aplastante victoria del PP en los comicios regionales vaya a variar el panorama político actual y mucho menos hacer peligrar el acuerdo de Gobierno sellado con la formación de Pablo Iglesias, Unidas Podemos, para esta legislatura.

Derrota “sin ambages”, pero sin trascendencia Esa es la opinión que la vicepresidenta primera del Ejecutivo español, Carmen Calvo, transmitió a los medios después de que su partido registrara una derrota “sin ambages” e inesperada. Calvo reconoció el fracaso socialista, pero desvinculó la derrota en las elecciones regionales de la salud del Gobierno de Sánchez.

Casado, líder del Partido Popular consideró ayer que la incontestable victoria de Díaz Ayuso, la actual presidenta regional madrileña, supone “una debacle histórica” de los socios del Gobierno y “un paso gigante” para vencer a Sánchez.

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Partido Popular
Las elecciones regionales de Madrid dejaron heridas en casi todas las candidaturas, pero especialmente en la formación liberal Ciudadanos, que pasó de cogobernar la comunidad autónoma con el Partido Popular a quedarse sin representación en el Parlamento autonómico.

Su dirección se reunió ayer con su líder nacional, Inés arrimadas, a la cabeza para analizar estos resultados que abocan un poco más al partido hacia la extinción.