Análisis deportivo

Análisis deportivo

Dice un viejo refrán que más vale prevenir que lamentar y aparentemente ese es un lema que en este país no se quiere aplicar en ningún sentido. Es algo parecido a aquello de que el dominicano no pone candado hasta que no le roban.

Digo esto porque desde un principio se dijo que las boletas para la Serie del Caribe eran demasiadas caras. Dijimos que en palco, los ricos iban a pagar lo que fuera, pero que en otros lugares no sucedería lo mismo y no hay manera de esconder lo que está a simple vista.

Pagar US$40 por un asiento de preferencia C (las sillas azules) es algo ilógico y hasta absurdo y por eso la asistencia ha sido baja en ese sentir y si se puede decir, un fracaso.

Desde el martes ya se decidió hacer el famoso 2 x 1 en el área que hacemos referencia y lo único que se puede esperar es que esto atraiga algo más de público aunque hablamos de más de RD$1,200 por persona.

Lamentablemente, la situación económica de nuestro país podría efectivamente poner en riesgo el futuro de las Series del Caribe en el país, tal y como lo dijo Mario Soto hace unos días.

[b]ACLARANDO[/b]

En la crónica que redactamos para la edición del lunes, relacionada con la inauguración de la Serie del Caribe, culpamos a Chiqui Haddad por el retraso en la ceremonia.

Con mucha decencia, el señor Haddad nos llamó para explicarnos que él solo era responsable del show artístico, el cual efectivamente duró apenas unos 11-15 minutos, tal y como estaba estipulado.

A Haddad le agradezco su llamado y por este medio hago el aclarando, ahora para el periodista que se está quejando de que se haya escrito una nota criticando el retraso, pues que siga hablando. El juego estaba anunciado para las 8:00 p.m. y comenzó a las 10:00 p.m., gústele o no, no se puede esconder.

[b]GRAN PERSONA[/b]

Ayer tuve la oportunidad de entrevistar a José Miguel Torres Cabrera, o Miguel Cabrera, como lo conoce la mayoría.

Tengo que decir que es uno de los peloteros más decentes que he entrevistado en mi corta carrera y además tiene una buena capacidad de responder las preguntas que se le hacen.

Contó Cabrera que su padre era un mecánico y le dio una gran ayuda tanto emocional como económicamente para que pudiera desarrollarse como pelotero profesional.

También relató que viene de una familia de peloteros ya que sus tres tíos paternos son beisbolistas. El nativo de Aragua apenas tiene 20 años de edad (cumplirá 21 el 18 de abril) y un futuro enorme por delante.

Ha demostrado que tiene los pies en la tierra y por ende no creo que pueda fallar si se mantiene saludable.

Publicaciones Relacionadas

Más leídas