El toletero dominicano Albert Pujols está rompiendo todos los esquemas ofensivas en el béisbol de las Grandes Ligas.

En una época en la que todo el mundo habla de esteroides, de edades alteradas, etc, etc, etc, Pujols aparece como una figura refrescante.

En el plano profesional, no he tenido una relación muy cordial que digamos con Pujols, pero es imposible dejar de resaltar lo que está haciendo.

Sus 30 cuadrangulares y 77 remolcadas hasta el juego de ayer, ponen al quisqueyano en un lugar casi histórico en las mayores.

Es apenas el décimo pelotero en la historia que llega a tres decenas de vuelacercas antes de iniciar el mes de julio.

Si mantiene lo que ha hecho hasta ahora, llegará a 60 jonrones.

Nadie lo ha hecho desde el 2001 cuando Sammy Sosa (64) y Barry Bonds (73) se metieron en ese grupo.

Lo de Pujols, verdaderamente no tiene comparación y solo se puede aplaudir, y mucho.