El gobernador del Banco Central, Héctor Valdez Albizu, se reunió con los encargados de tesorería de los bancos múltiples autorizados a operar, con quienes analizó los reglamentos de riesgo de liquidez y riesgo de mercado.

En el encuentro celebrado en el Banco Central, los tesoreros de la banca múltiple manifestaron  sus observaciones sobre los reglamentos, las cuales fueron analizadas en un ambiente de receptividad y cordialidad que caracteriza a las presentes  autoridades monetarias, indica un boletín de prensa.

Añade que Valdez Albizu estuvo acompañado del gerente, Pedro Silverio; del director del Departamento Financiero, licenciado Ervin Novas Bello y de otros funcionarios de la institución.

El objetivo de estas normas, que entrarán en vigencia a partir del 31 de mayo del 2005, es requerir a las entidades de intermediación financiera, la medición, control y evaluación de los riesgos originados por variaciones en los niveles de liquidez, las tasas de interés y de cambio, así como resguardar a dichas entidades de los efectos que sobre sus activos y pasivos tienen estas variaciones.

Entre los  aspectos discutidos figuran los  relativos al grado de responsabilidad de los consejos de administración con respecto a los niveles de riesgo de mercado y liquidez de las entidades de intermediación financiera y la extensión del plazo de entrada en vigencia de la normativa.

Asimismo, el conocimiento por parte los gerentes sobre los riesgos inherentes a las operaciones bancarias, la fecha de reporte de las informaciones utilizadas para el cálculo de los riesgos y la constitución de reservas liquidas en el Banco Central, entre otros.

Expresa que algunas de estas observaciones fueron acogidas por las autoridades monetarias y que otras recibieron la promesa de ser debidamente ponderadas dentro del  marco de los requerimientos establecidos en el acuerdo Stand-by firmado por el país con el Fondo Monetario Internacional (FMI).

Dice, finalmente, que la implementación de los Reglamentos de Riesgo de Liquidez y de Mercado proveerá a las autoridades supervisoras y reguladoras de un marco normativo preventivo, que permitirá conocer los efectos de los riesgos a que están expuestas las entidades de intermediación financiera, requiriendo constituir las provisiones necesarias para mitigar el efecto que sobre sus activos y pasivos tienen los mismos, en interés de fortalecer el sistema financiero y preservar la estabilidad financiera del país.