Las personas de la tercera merecen atenciones privilegiadas en los espacios que dan servicios, sin embargo, en la jornada de vacunación contra covid para envejecientes mayores de 70 años, este sector de la población se ha visto sometido a largas filas para recibir la inoculación, donde pueden tardar de hasta cuatro horas.

Tal es el caso del centro de vacunación instalado en el Club Naco, a las 12:00 del mediodía de este martes habían decenas de ancianos en las afueras de este establecimiento, esperando sentados, pero debajo del sol, que llegasen más dosis de la vacuna sinovac.

Personas de la tercera edad, algunas acompañadas de sus hijos, con diversas discapacidades físicas y comorbilidades denunciaron que llegaron al puesto de vacunación a las 7:00 y 8:00 de la mañana y no pudieron ser inoculadas porque las dosis se habían agotado. Permanecían en el lugar bajo la promesa de que Salud Pública enviaría más frascos.

Entrando al establecimiento cedido por el Club Naco para la jornada, se pudo constatar a cientos de ancianos agrupados en secciones, un grupo esperaba la asistencia para llenar el formulario de vacunación, otro esperaba su turno para la inoculación y, finalmente, estaban los mayores vacunados en el área de observación.

Aunque había espacio suficiente en el local para guardar el distanciamiento físico de un metro y medio, el equipo de logística los tenía en orden, pero agrupados.

El doctor Víctor Jassiel Arias es el coordinador del la jornada de vacunación que funciona en el referido local. Informó que recibió de las autoridades sanitarias 270 dosis y que para el momento de la entrevista otorgada al periódico hoy, esperaba más vacunas para responder a la demanda de cientos de pacientes que tenían toda la mañana esperando un turno para inocularse.

Aunque en todos los centros de vacunación, la atención para los mayores con discapacidad y problemas de salud, perceptible al ojo médico, son atendidos primeros, el galeno indicó que su responsabilidad como coordinador es de lo que sucede dentro del puesto de vacunación, en el momento que su equipo recibe al paciente. Indicó que es el personal del local prestado a Salud Pública quien organiza las filas y facilita la entrada de los habilitados para ser vacunados en esta fase.

«El proceso de logística inicia cuando llegan a la mesa de registro, aquí se le toman sus datos, se le entrega el consentimiento informado y luego proceden a la parte de la vacunación, se le llena su ficha donde se le indica cuándo deben tomar la siguiente dosis y se queda en observación durante unos 15 ó 20 minutos», manifestó.

Hospital de los Billeteros

En el hospital Félix María Goico, mejor conocido como «hospital de los Billeteros», los ancianos denunciaron favoritismo en los turnos para la administración del antídoto contra el coronavirus.

«Las personas de adentro que tienen que organizar a las personas según van llegando han mantenido un estado de anarquía repartiendo los formularios para el registro de las personas y luego lo han recogido de una forma anárquica. Las personas se han mantenido sentadas en su sitio, entonces la administración de la vacuna ha sido selectivamente, incluso a favor de personas que no están en el rango de edad que corresponde a esta etapa», denunció José Fermín, un adulto mayor de 79 años.

En el lugar solo había un oficial para preservar el orden aunque por ratos fue imposible. Los adultos mayores se paraban de sus asientos para protestar frente a la entrada de la caseta de vacunación que funcionaba en en el patio del referido hospital.

Denunciaron ante al periódico Hoy que personas que no figuraban en el rango de edad estaban siendo inoculadas en perjuicio de ancianos mayores de 70 con comorbilidades que esperaban vacunarse hoy.

Tal fue el caso de Francisco Martínez y Erasmo Alberto de 60 y 61 años, respectivamente, quienes fueron vacunados y no tuvieron inconvenientes por su edad, revelaron.

Sin embargo, Erasmo Alberto, un adulto mayor que estaba en el área de observación luego de ser inoculado, negó que hubiera favoritismo, señaló que las vacunadoras atendieron primero a los pacientes que se registraron ayer y no recibieron la dosis.

Los personas de la tercera edad también se quejaron porque tienen que llenar ellos mismos los formularios de registros sin la asistencia de un personal que le explique el documento que rubrican. «Ni lapiceros nos entregan», deploró José Fermín.

Club San Carlos

El Club San Carlos, que inició ayer tímidamente su jornada de vacunación, tuvo mayor concurrencia este martes.

La jornada se desarrolló sin inconvenientes en este puesto de vacunación que, a pesar de ser espacioso, mantener el distanciamiento físico entre los solicitantes de la vacuna fue una tarea difícil para el promotor de salud.

A este puesto de vacunación se presentó la vicepresidenta Raquel Peña, allí declaró que están realizando los aprestos necesarios para que el proceso de vacunación en el país se realice en orden, esto a raíz de las aglomeraciones registradas en varios centros dónde se aplica la vacuna anticovid.

La también coordinadora del Gabinete de Salud aseguró que el proceso de inoculación será por cita como está concebido en el protocolo de vacunación anunciado el pasado 15 de febrero al país.

Tanto el Club San Carlos como el hospital de los Billeteros recibieron a penas 120 dosis de la Sinovac. Sus coordinadores manifestaron que existía la posibilidad de que Salud Pública reforzara durante el día la cantidad de dosis debido a la gran concurrencia de sus demandantes.