El Gobierno interino de Bolivia envió ayer un proyecto de ley al Parlamento para que inicie el proceso hacia unos nuevos comicios, aún sin fecha exacta aunque en su enunciado dice “para las Elecciones Generales 2020”, en medio de la grave crisis en el país que ha dejado 30 muertos.
El proyecto fue entregado al Parlamento, en el que tiene mayoría el Movimiento al Socialismo, de Evo Morales, quien renunció el 10 de noviembre a la Presidencia y está ahora asilado en México. Jeanine Áñez, quien asumió la Presidencia de forma interina tras la renuncia de Morales, dijo que el objetivo del proyecto es garantizar un proceso electoral “transparente” y que el resultado en las urnas “sea respetado».
El 10 de noviembre, Evo Morales anunció su renuncia tras casi 14 años en el poder, forzado por las Fuerzas Armadas, y al día siguiente salió hacia México.
Las protestas comenzaron al día siguiente de las elecciones del 20 de octubre, entre denuncias de fraude a favor de Evo Morales, que fue proclamado vencedor para cuarto mandato consecutivo, pero renunció tras informe de OEA que advirtió graves irregularidades en comicios.
Esas elecciones, en palabras de la presidenta interina, desembocaron en “fraude electoral que provocó muchísima convulsión” en el país. La jefa de Estado provisional recordó que tiene que ser la Asamblea Legislativa o Parlamento la que debe nombrar un nuevo órgano electoral. Los miembros del Tribunal Supremo Electoral central y de sus delegaciones en las 9 regiones de Bolivia están procesados, algunos con prisión preventiva, por supuesto fraude comicios.