POR LLENNIS JIMÉNEZ
Atención primaria de la mejor calidad y un tetero con leche cada dos horas, son presagios de la retribuida vida que le espera a Ángel Simón, el bebé rescatado de un tanque de basura el pasado 12 de este mes.

La suerte de este niño, bajo investigación y cuidados del Consejo Nacional para la Niñez y la Adolescencia (CONANI), la decidirán las autoridades gubernamentales, que desde ya tienen la difícil tarea de lidiar con unas 70 personas que llaman insistente en procura de la adopción del pequeño. Sin embargo, las autoridades no lo han declararlo oficialmente en estado de abandono, con la esperanza de que un familiar lo reclame. 

Ángel Simón, cuya identidad no puede ser develada por razones legales, mueve la vista, los brazos y evoluciona favorablemente. La psicóloga del Departamento de Adopción de CONANI, Lisbet Rodríguez, al ofrecer información sobre la situación de Ángel Simón, indicó que el niño, está rodeado de cariño.

El contexto de la vida de Ángel Simón, con apenas unos 15 días de nacido y un peso de poco más de ocho libras, está ligada a un terrible pasado que CONANI se encargará de evitar que sufra, bajo la garantía de sus derechos humanos.

El infante cobró importancia a partir de que unos obreros de limpieza del Distrito Nacional lo encontraron dentro de un tanque de desperdicios, que llegaron a voltear en un camión compactador, que sería trasladado al vertedero de Duquesa. Fue dejado envuelto en una sabana de hospital, color verde, en un cubo de desperdicios sólidos, frente a un local marcado con el número 14, en la calle Madame Curie casi esquina Nicolás Bari, próximo a la Casa del Conductor. “Actualmente el estado del niño es estable, se encuentra en un estado de salud normal. Realmente las informaciones no han variado mucho con relación a lo que se había expuesto en la prensa anteriormente”, manifestó Rodríguez. La profesional de la salud explicó que el bebé evoluciona de acuerdo a su edad. Consideró que el niño no estuvo mucho tiempo en estado de abandono.

El enigma que rodea los días que antecedieron a Ángel Simón antes de ser llevado al zafacón, motivo de interés para los medios de comunicación, están siendo seguidos por CONANI, como parte de la ficha técnica que acompaña la investigación de su procedencia.

Empero, las situaciones de su rescate las tienen las autoridades judiciales, la primera en alimentarlo y darle los primeros cuidados. Con mucho primor Ángel Simón es ya candidato para recibir atención psicológica y estimulación temprana, está última está orientada a motivarle el desarrollo.

De acuerdo a Rodríguez el equipo de trabajo al servicio de estos niños lo integran enfermeras, psicólogos y médicos de varias especialidades. CONANI mantiene al pequeño fuera del alcance de los curiosos en respeto a sus derechos consagrados en la Ley 136-03, sobre el Código para la Protección de Niños, Niñas y Adolescentes.

ABANDONADOS

CONANI cuida siete niños abandonados y todos están bajo investigación. La psicóloga Rodríguez señaló que cuatro bebés fueron encontrados en distintos hospitales y que los otros dos fueron entregados voluntariamente por sus padres y otras situaciones que no especificó.

 Subrayó a todos estos niños les dan el mismo cariño y asistencia.

La adopción a  la luz del derecho

La adopción es entendida como la institución jurídica que atribuye la condición de hijos o hijas a un adoptado. Estos tienen los mismos derechos y deberes que los demás miembros del hogar donde entran, incluyendo los sucesorales, extinguiendo los vínculos con su familia de sangre. Pero prevalecen los impedimentos matrimoniales con los parientes directivos de quienes los acogen.

Este acto jurídico crea un vínculo de filiación ficticia entre el adoptante y el adoptado, sin que el adoptado pierda sus derechos en la propia familia. La adopción de un menor ocasiona, sin embargo, la transferencia de la patria potestad al adoptante.

La característica más trascendental de la adopción está en que asegura la protección del menor desamparado, ya sea mediante la adopción privilegiada (que lo incorpora en calidad de hijo legítimo a la nueva familia).

La psicóloga Rodríguez manifestó que hasta ahora nadie ha solicitado adopción internacional en CONANI, es decir, que extranjeros no se han interesado por ampararlos. Una de las condiciones requeridas para ser adoptante es ser mayor de 30 años, tener una familia equilibrada y un nivel económico que no ponga en peligro la protección del niño que se responsabiliza a criar.