Con la diferencia de un día para cumplirse un año de la muerte de la joven dominicana de ascendencia rumana Andreea Celea, quien cayó al vacío desde un octavo piso de un hotel cuando se encontraba en compañía de su novio, murió tras recibir varios impactos de bala de manos de su pareja la abogada Anibel González, en San Pedro de Macorís.
Ambos hechos, el primero ocurrido el 1 de septiembre del 2018 en un exclusivo sector de la Capital, y el segundo el pasado sábado 31 de agosto en dicha provincia, estremecieron al país y cuestionaron de manera directa las campañas de las autoridades, así como la dureza de la ley y los procedimientos judiciales en esa materia.
Aunque estos casos se encuentran entre los más sonados a nivel mediático por sus características y porque, de alguna manera, coinciden en distintos puntos, la realidad es que en medio de esos 12 meses en que ocurrieron estas muertes, han sucedido otros hechos que envuelven asesinatos a manos de hombres en contra de su pareja o ex pareja, algunas de las cuales usaron las redes sociales como auxilio para ser escuchadas.
Sin embargo, ante la relevancia que tomaron los casos de González, de 29 años, y Celea, se realiza una reseña de algunas de las coincidencias que se podrían señalar, de acuerdo a las reseñas periodísticas que trascendieron sobre el caso.
Para el caso de Celea, de 21 años de edad y por cuyo caso guarda prisión preventiva su novio Gabriel Villa Nueva, se denunció que éste la maltrataba de manera constante tanto física y psicológicamente, obligándola incluso a dejar un trabajo que había conseguido.
Además, bajo el efecto del enojo Villanueva supuestamente lanzaba objetos por las ventanas, tales como platos, vasos y otros. La joven tenía una orden de alejamiento expedida el mes de julio de ese año.
Cuando se separaron, había expresado a sus familiares que se sentía amenazada e incluso, supuestamente Villanueva llegó a amenazar a la hermana de Celea con matarla.
En ese caso también es notorio que los familiares del presunto agresor pertenecen a una clase social privilegiada, según informaciones que han trascendido sobre el caso.
Mientras que en el caso de la abogada González, los mensajes de la red mensajería instantánea WatsApp, dan cuenta que de que ella estaba siendo amenazada de muerte por Yasmil Oscar Fernández Estévez y que se sentía desamparada.
Además, Fernández Estévez, un empresario de San Pedro de Macorís quien se suicidó tras cometer el hecho, intentó asesinarla en el año 2017 de varias puñaladas, situación que la dejó grave y que significó que el agresor fuera a la cárcel, desde donde presuntamente la llamaba constantemente para amenazarla.
Anibel González buscó de manera constante asistencia ante las autoridades, quienes luego de su muerte, se determinó que llegaron a un acuerdo en que el agresor resultó libre, y en el cual se determinó violación a dos instrucciones y una homologación por parte de los jueces de dicho acuerdo.