Desde hace siglos el anís  es uno de los licores más simbólicos asociados a la celebración de Navidad y la llegada del Año Nuevo.

En esta temporada de aires frescos, nada mejor que mantener la buena costumbre de compartir un momento cálido con la familia y los amigos y degustar juntos una copa de anís para acompañar el café, el postre o simplemente la charla de sobremesa.

El anís es una bebida milenaria muy conocida por su aromática fragancia. En la Europa medieval se le reconocían virtudes medicinales estomacales, de ahí su extendido uso y fama de buen digestivo.

El anís más famoso proviene de España, de la tierra del Chinchón; tiene fama de ser el más puro y auténtico destilado que, aún en nuestros días, se elabora de forma artesanal.

Se emplea como ingrediente tanto en la preparación de platos salados y dulces como en panadería y repostería, donde se convierte en un elemento de primera línea.

Esta Navidad usted se puede auxiliar del anís para sorprender a sus comensales con tragos elaborados con este licor como por ejemplo: “carajillo”, “anís enamorado” o “antojo”.

Anís del mono

Nace en Badalona (una comunidad de Barcelona) en el 1870. Sus ingredientes son: anís de estrella, cilantro, regaliz y otro tipo de anís estrellado, naturalmente, agua, azúcar y alcohol.

Es un licor bueno, pero fuerte y es mejor no abusar. Este es el anís más utilizado para mezclar en bares y restaurante del país.

Esta variedad de anís se acostumbra a mezclar con agua muy fría, pero sobre todo en el café. Después de un almuerzo muy fuerte, es  ideal para “refrescarse” la boca. Por lo regular, se consume en zonas frías.

Para después de una buena cena

En estos días de Navidad, las reuniones familiares propician que se cometan excesos gastronómicos. Comemos y bebemos de forma mucho.

Así, la cena de Navidad se compone de aperitivos, carnes, arroces y muchos dulces. Cuando el estómago empieza a pedir a gritos un antiácido, alguien dice ¿un licorcito? Entonces lo más ideal para seguir la fiesta es el anís.

Otra variedad

En Italia es conocida como la Sambuca es un licor a base de anís que se sirve sólo o con hielo, y actúa como digestivo.

Durante siglos, los aguadores, conocidos como Sambucchelli, llevaban agua con sabor a anís a los campesinos que trabajaban en el campo. Así, a mediados del siglo XIX, comenzó a elaborarse y embotellarse la Sambuca.

Las claves

1. Variedad

Según donde nos encontremos puede tener distintos nombres.

2-  Chinchón

 Este es un anís muy conocido, el cual se produce en  ciertas zonas de España.

3-  Cazalla

Se produce en  zonas de España y en ciertos países árabes. En Colombia se le conoce como aguardiente.

Las  recetas

Anís al café o carajillo

1 medida de anís

3 medidas de café

Canela en polvo

Preparación. Una vez que cuentes con estos ingredientes podremos comenzar con la preparación de café al anís siguiendo las siguientes instrucciones. Verter en un vaso “old fashioned” el anís y el café. Revolver y espolvorear con la canela. Este trago es ideal para degustar después de la comida.

Confite enamorado

Un chorrito de anís

Un chorrito de leche condensada

Hielo

Preparación. Mezcle en un vaso el anís con la leche y el hielo y deguste. Esta receta puede variar, si a usted no le gusta muy dulce puede sustituir la leche condensada por leche evaporada. Como su nombre lo indica es un trago para compartir con el ser amado, en estos días frescos.

Licor de anís

1 litro de agua

1 libra de azúcar

1/2 litro  de alcohol

30 gotas de esencia de anís

Preparación. Mezclar el agua y el azúcar y hervir durante cinco minutos. Dejar enfriar y añadir el alcohol. Echar las gotas de esencia una por una probando la preparación, ya que varía su intensidad según la marca. Pasar por filtro de papel y envasar. Se puede guardar por hasta un año.