En ocasión de los resultados del Informe de Competitividad del Foro Económico Mundial, la señora Lara Guerrero, Presidente de la Asociación Nacional de Jóvenes Empresarios (Anje), resaltó que el país debe reorientar las políticas públicas y definir prioridades para resolver los temas que inciden negativamente en la competitividad del país.

Guerrero expresó que “según los datos que arroja el informe del Foro Económico Mundial 2011 – 2012, el cual evalúa el posicionamiento en materia de competitividad de 142 países, la República Dominicana bajó nueve posiciones, ocupando ahora el lugar 110 en la escala de competitividad, lo cual resulta altamente preocupante y demuestra que como país hay tareas que hemos dejado de cumplir.”

La institucionalidad y la educación son dos temas de alta incidencia en la construcción del índice de competitividad, por lo que la coyuntura actual del país nos presenta dos grandes oportunidades para mejorar el clima de negocios y la percepción de nuestro nivel de competitividad.

Primeramente, Guerrero resaltó que “es altamente preocupante que de acuerdo a los datos presentados por el informe económico mundial, el país ocupe el lugar 88 en materia institucional y el 115 en materia de independencia judicial, por ello consideramos que la transparencia en el proceso de selección de jueces de las Altas Cortes representa una oportunidad para garantizar y fortalecer la autonomía del Poder Judicial.”

Segundo, en lo relativo a los datos presentados en el Informe del Foro Económico Mundial  sobre el sector de educación, Anje resalta que son vergonzosos los valores obtenidos en dicho reporte, el cual coloca la calidad de la educación primaria del país en el lugar 140, quedando por debajo solo los países Yemen y Angola.

En este sentido, Guerrero resaltó que “durante la semana pasada se llevó a cabo el Compromiso Político y Social por la Educación, el cual valoramos y esperamos que sea asumido con la responsabilidad e importancia que demanda la materia, con miras a que se identifiquen y ejecuten políticas públicas más acertadas y medidas correctivas que permitan una mejor canalización de los fondos destinados para la Educación, para garantizar el uso óptimo y eficiente de estos recursos, y superar así las vergonzosas calificaciones obtenidas  en calidad de la Educación en el reporte del Foro Económico Mundial.”

Anje aboga porque se aborden los desafíos que afectan y limitan la competitividad en materia de educación, institucionalidad, independencia judicial y eficiencia del gasto público, de manera que podamos fortalecer la competitividad dominicana, y así garantizar un clima de negocios más favorable.