Algunas personas no lo creen. Otras simplemente no lo entienden y a unas cuantas no les conviene, pero lo cierto es que, a pesar de los pesares, la sociedad dominicana está avanzando.

Hay mayor conciencia medio ambiental. La lucha por la preservación del Parque Nacional Los Haitises y por Loma Miranda lo confirman. Hay mayor conciencia por la importancia de la educación, la lucha por el 4% y la vigilancia en la actualidad ante la amenaza de incumplimiento lo evidencian. Ha avanzado en el rechazo a la corrupción y la impunidad y así lo demostró con las multitudinarias marchas verdes.

Sin embargo, como país tenemos muchos temas en los que aún está pendiente avanzar y uno de ellos es la forma en que se hace campaña. Se trata de un período ilegalmente extenso, costoso y carente, en su gran mayoría, de propuestas.

Por eso son sumamente oportunos los resultados del estudio “El votante joven dominicano y su impacto en la consolidación de la democracia” que presentó recientemente la Asociación Nacional de Jóvenes Empresarios (ANJE).

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Ahí se establece cuál es el tipo de campaña que espera una parte importante del electorado; los y las jóvenes que representan, nada más y nada menos, que el 35 por ciento del padrón electoral.

Pues miren qué interesante, la juventud tiene altas expectativas de la campaña, tanto así que espera las mismas se enfoquen en cambios estructurales a largo plazo y no sólo en la cotidianidad.

En ese sentido, el mismo estudio de ANJE reveló cuáles son esos temas que la juventud prioriza, siendo novedoso que además de algunos que salen de manera recurrente en encuestas y sondeos actuales, como la seguridad ciudadana y los empleos, aquí entran en el top cinco otros como la educación, la salud y la corrupción.

Ahora bien, en mi opinión, uno de los puntos nodales de esta investigación es que evidencia el rechazo a los elementos centrales del tipo de campaña que se hace en República Dominicana. Y es que la juventud desaprueba las promesas incumplidas/irrealistas (19.0%), la contaminación que provocan (14.4%), la poca transparencia en el reporte de gastos de los partidos (11.9%) , la entrega de dinero o alimentos (11.4%) y los mítines y marchas ( 10.0%)

Por el contrario, sí esperan y demandan que sus representantes rindan cuentas y se comprometan a gestionar los problemas del país de manera efectiva, y que participen de debates electorales (71.2% de las y los encuestados lo considera necesario para conocer cuáles son los planes de los aspirantes a cargos electivos).  

En fin, en periodismo solemos decir que los datos hablan. Los datos de este estudio de ANJE hablan y de manera contundente sobre la campaña que sí quiere la ciudadanía. Ojala la clase política ponga oídos, de lo contrario, dicen por ahí que guerra avisada no mata soldado y si lo mata es por descuidado.