Anje y economista consideran legítima preocupación de la AIRD

Anje y economista consideran legítima preocupación de la AIRD

El presidente de la Asociación Nacional de Jóvenes Empresarios (ANJE), Osvaldo Oller, y Miguel Collado Di Franco, economista senior del Centro Regional de Estrategias Económicas Sostenibles (CREES), consideraron ayer legítima la preocupación de la vicepresidente ejecutiva de la Asociación de Industrias de la República Dominicana (AIRD), Circe Almánzar, en el sentido de que la situación del país es una “bomba de tiempo”, por lo que demandó la aplicación de reformas para que el sector privado pueda invertir y crear empleos.

El presidente de ANJE cree que si se prosigue el ritmo de endeudamiento y el uso de esos recursos, el país tendrá problemas en un mediano plazo.

Criticó que la República Dominicana se endeude para pagar gastos corrientes como está ocurriendo en la actualidad.

Precisó que ese endeudamiento tiene que estar destinado a inversión de capital para que tenga retorno de los diferentes proyectos.

Dijo que con el endeudamiento se está creando una bola de nieve.
Para aumentar el empleo formal, dijo, se debe hacer una reforma del mercado laboral, a fin de que se disponga de un Código de Trabajo que esté actualizado con este tiempo para mejorar la competitividad de las empresas.

Puntualizó que es momento de sentarse en la mesa de discusión entre los sectores empleador, sindical y público, a fin de que se logre modificar el Código de Trabajo.

Señaló que en la discusión del año pasado hubo consensos entre los sectores empleador y laboral, aunque un punto ocasionó disenso, por lo cual se debe retomar el diálogo que se celebraba en el Instituto Tecnológico de Santo Domingo (Intec).
Expresó que con la modificación de la pieza se busca mejorar la calidad del empleo e incrementar los empleos formales.

Dijo que se está tratando de que se creen empleos formales en el sector privado para poder enfrentar el ritmo de personal que ingresa a la población económicamente activa.

Consideró que se debe enfocar en crear empleos formales y llevar a las empresas informales a la formalidad.

Criticó que en los últimos años el 40% de los empleos creados corresponden al sector público.

De su lado, Collado Di Franco dijo que la preocupación de Circe Almánzar es legítima, sobre todo por la situación fiscal que enfrenta el país.

La congelación de la nómina pública, a su juicio, es un reconocimiento de las autoridades de que hay un problema fiscal, aunque eso no resuelve absolutamente nada.

“Se necesitan acciones que en realidad lleven a la reducción del gasto y, sobre todo, al incremento del gasto de capital”, manifestó el economista de la CREES.
Entiende que es necesario una revisión del tamaño del Estado en cuanto a la duplicidad de funciones, redundancias y gastos excesivos.

Señaló que este año el déficit fiscal será el doble de lo presupuestado por las autoridades, lo que representaría unos US$2,000 millones.

Abogó por una Ley de Responsabilidad Fiscal y una reforma tributaria.

“Ambos elementos serían esenciales para un pacto fiscal, ayudarían a las finanzas públicas tanto para el control como el incremento de la presión tributaria con una reforma que baje tasas impositivas y amplíe la base”, sostuvo.

Una reforma tributaria ayudaría en la competitividad del país, puntualizó.
Señaló que el país tiene unos niveles de costos muy altos comparados con otros países de la región y uno de los factores que inciden en ese costo es la carga impositiva de las empresas locales.

Consideró que debe hacerse una reforma eléctrica que despolitice a las tres distribuidoras, y una reforma al Código de Trabajo, con lo cual se ayudaría a reducir costos internos.

Indicó que el país tiene una elevada carga impositiva, lo que va en contra de quienes quieren crear empleos formales. La informalidad que genera el código tributario es muy alta, dijo.

Cuando haya mayor formalidad en el sector laboral se tendrá mayores ingresos y una carga tributaria mejor distribuida entre toda la economía, planteó.

Cree que un sistema tributario tan complejo para el contribuyente y la administración tributaria es difícil atraer mayor inversión y generar inversión local.

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