Los colores, los tambores, la danza del dragón, la comida, el colorido y la algarabía caracterizaron el ritual realizado en la Marina de Casa de Campo, con motivo de la celebración del inicio del «Año Nuevo Chino».

Dueños de villas, residentes e invitados disfrutaron en la Plaza Portofino la más trascendental de las fiestas tradicionales de China, sin que faltaran ninguno de sus elementos alegóricos, ni los buenos deseos.

«La danza del Dragón», que caracterizó la celebración, envolvió en un ambiente oriental el lugar, y coronó la ancestral celebración que cada año organiza el restaurante Chinois, en víspera del nuevo año y con una representación de la colonia china radicada en el país. complementado por el ballet de las niñas de Pointe dirigido por Julissa Lied.

Los esposos Ricardo Bello y Susana Joa, propietarios del restaurante Chinois,  como  anfitriones encabezaron cada una de las escenas del ritual.

El  Chinois se vistió de gala al asumir  como una magnifica oportunidad para ofrecer  un exquisito menú de exóticos y variados platos y un  ambiente  cargados de optimismo a la  espera del «Año de la Rata».