Ante la aprobación de la reforma fiscal, la Red Nacional de Acción Juvenil se declaró hoy en desobediencia civil y llamó a la población a no pagar impuestos.
“El pueblo ha sido traicionado, este gobierno es ilegal e ilegitimo y el único camino que nos queda es desobedecer, rehusarnos a pagar lo que sabemos que se van a robar; por eso debemos negarnos a que nos sigan estafando y nos nieguen nuestros derechos”, manifiestan los jóvenes en un comunicado enviado a este medio.

Dicen que ahora el Gobierno habla de 187 mil millones de pesos como déficit fiscal, cuando durante ocho años hablaron de estabilidad económica, “engañando al pueblo, endeudando al país y repartiéndose los recursos entre la cúpula peledeísta”.

Abogan por reforma ética. Expresan que la reforma que entienden como necesaria y vital para poder reparar el daño causado a la sociedad dominicana, es una reforma ética y con ella una sanción penal contra los reales responsables de esta crisis.

“Si se quiere respetar a la población, deben ser juzgados en los tribunales de la República quienes están comprometidos directamente con dicha situación”, señalan.

A continuación el documento íntegro.

Ante el robo y el desfalco del Estado Dominicano, la respuesta es desobedecer y rehusarnos a pagar lo que sabemos que se van a robar!!

“Toda autoridad no constituida con arreglo a la ley es ilegítima, y por tanto, no tiene derecho alguno a gobernar ni se está en la obligación de obedecerla”.

Juan Pablo Duarte

La sociedad dominicana ha sido encaminada hacia un derrotero, desinstitucionalizandola y colocando el Estado al servicio de un cartel que se apropia de los recursos públicos para hacerse millonarios a expensa de la población.

El engaño, la mentira han sido la herramienta para enajenar y mantener silente a una población que vive contantemente pagando el precio de la acumulación de una clase política corrupta y sin sensibilidad, que solo está interesada en repartirse el botín del Estado.

El enriquecimiento ilícito como fruto de la apropiación de los recursos públicos, se visualiza en las nuevas familias millonarias, nacidas en el seno de un partido que se sirve a él y no le sirve al pueblo, que lo integran figuras que pasaron de ser profesionales asalariados, a prósperos empresarios, sin historial crediticio, sin inversiones conocidas y sin vinculaciones con la industria nacional.

El ejercicio de la política ha sido cualquierizado, se ha desconceptualizado, cambiando sus objetivos originales que apuestan a la búsqueda del bien común, para llevar al  ser humano a un estado de degeneración avergonzante, convirtiéndolo en mendigo de sus propios derechos, a través de las dadivas que reparten desde el gobierno, como forma de canjearse favores y lealtades.

Han cambiado los valores de la democracia por el hurto, la deslealtad, la mentira, el irrespeto, la ingratitud y el individualismo. Generando la moral del robo, construyendo la sociedad del desorden, donde la ética bochista es relegada al basurero de la historia. De ahí  que la frase que Juan Bosch acuñara sobre que “A la patria no se le usa, se le sirve”, fue borrada de la memoria de quienes hoy dirigen el Partido que él fundara.

Este cartel, camuflajeado como partido político ha destruido el Estado de Derecho, desmejorando la calidad de vida de los ciudadanos, violando reiteradamente sus derechos e impidiendo sus posibilidades de desarrollo y bienestar.

La ilegalidad es la práctica por excelencia de esta agrupación, que se preserva en el poder sobre las bases del fraude, la violación a la Constitución y a las leyes, así como el secuestro de los poderes del Estado, para imponer la cultura de la impunidad, que los protege de los robos que han hecho de los bienes de la población dominicana.

El irrespeto total a la toma de decisiones de los ciudadanos, donde se altera la voluntad de las personas, a través de dadivas y engaños publicitarios, comprando favores de comunicadores irresponsables y mercenarios, regalando los recursos naturales a empresas extranjeras que lesionan el interés nacional.

La apropiación de los bienes colectivos, es el mecanismo de acumulación de este cartel llamado PLD, donde su presidente Leonel Fernández Reyna, se encargo de venderle al país, que teníamos “estabilidad macroeconómica”, que “la económica estaba blindada”, que todos los años “había crecimiento económico”, que vivíamos en un “Estado de Derecho”, que éramos un “Nueva York Chiquito”, situación que era solo parte de la ilusión y la falsa que imponían, mientras el gobierno era desangrado a favor de los intereses de este grupo.

Este grupo que simboliza el atraso y la insensibilidad, que son la vergüenza de nuestra sociedad, hoy quiere traspasarles a la población la culpa de los problemas que ellos han propiciado.

Hoy nos hablan de 187 mil millones de pesos como déficit fiscal, donde durante ocho años, se mantuvieron hablando de estabilidad económica, engañando al pueblo, endeudando el país y repartiéndose los recursos entre la cúpula de esta mafia peledeista.

La reforma que entendemos como necesaria y vital para poder reparar el daño causado a la sociedad dominicana, es una reforma ética y con ella una sanción penal contra los reales responsables de esta crisis. Es en tal sentido, que si se quiere respetar a la población, deben ser juzgados en los tribunales de la República quienes están comprometidos directamente con dicha situación, nos referimos a los líderes del cartel:

Leonel Fernández Reina, Danilo Medina, Margarita Cedeño, Félix Bautista, Temístocles Montás, Reinaldo Pared Pérez, Francisco Javier García, José Ramón Fadul, Radhamés Segura, Radhamés Camacho, Rafael Alburquerque, Alejandrina Germán, Bautista Rojas Gómez, César Pina Toribio, Cristina Lizardo, Haivanjoe Ng Cortiñas, Euclides Gutiérrez Félix, entre otros tantos.

Pero estamos conscientes de que no existen las garantías posibles, para que en los actuales momentos, dicha cofradía pueda ser sometida a la acción de la justicia, ya que estos tienen el control de los poderes del Estado.

El Estado dominicano se encuentra raptado por el cartel peledeista, control asumido a través de métodos espurios, de prácticas deshonestas, de compras de voluntades y de imposiciones de fuerza. Su ejercicio en el poder no responde a las necesidades colectivas, solo atropellan los derechos de la ciudadanía, dejándolos sin respuestas ante los servicios básicos que demanda la misma. De igual forma han quebrado el aparato productivo, sustituyéndolo por las importaciones a favor de mafias empresarias que están conectadas a su circuito de acumulación.

El fin de este gobierno está fuera de los intereses de la población y se coloca en su afán escrupuloso de seguir alimentando las cuentas de los directivos de este cartel, que ostentan una inmensa fortuna extraída del patrimonio público.

El pueblo ha sido traicionado, este gobierno es ilegal e ilegitimo y el único camino que nos queda es desobedecer, rehusarnos a pagar lo que sabemos que se van a robar; por eso debemos negarnos a que nos sigan estafando, a seguir alimentando el parasitismo de este partido-cartel, a seguir multiplicando las fortunas de estos mercenarios, ha continuar con esta corrupción insoportable, a que nos sigan empobreciendo, a que nos acorten la vida, a que nos nieguen nuestros derechos.

“Cuando la ley es injusta, lo correcto es desobedecer”

Mahatma Gandhi

Desobedecer hasta vencer!!!