A los hermanos Guillén les acaban de dar el Premio Areíto como Artesanos del Año en Nueva York. En el transcurrir de ese evento que llena de orgullo a los que somos del Caribe y Las Antillas y nos sentimos deudores de la cultura nativa, de nuestros taínos y de lo que nos legaron, lo que pudo ser y no fue. En ese evento promovido por gestores puertorriqueños, nos encontramos con Irka Mateo, quien en ese marco fue una pequeña pero potente luz. Toda su historia cobraba sentido cantando a Liborio, a Ay Tana la maricutana…, entre otros coros que retumban en el aire de nuestros ancestros.
Hermosa, talentosa y nuestra, ya había sido ganadora de Areíto Award en el área de la música, en el 2009. Manuel y Jesús Guillén ganan como Artesanos del Año en este 2012, motivo de alegría para Yamasá y Monte Plata. Fue una noche de poesías, danzas, teatro y canto por los taínos. Una pequeña acción cultural que tiene cuatro años y que seguirá por mucho tiempo enarbolando la bandera de una identidad que no debemos ni queremos dejar atrás.