Antonio Peña Mirabal – El PPH y el PRD jugando con el país

Antonio Peña Mirabal – El PPH y el PRD jugando con el país

La facción que hacia lo interno del Partido Revolucionario Dominicano, PRD, dirige el presidente de la República, agrónomo Hipólito Mejía, no tiene derecho a involucrar a todo el país en la disputa interna que en la actualidad sostienen los principales dirigentes de ese partido. El afán desmedido del PPH por la postulación del agrónomo Mejía nuevamente, ha desbordado los límites del partido blanco, al extremo que ya se habla de una modificación a la Constitución de la República, que permita que un mismo partido político pueda presentar varios candidatos en las próximas elecciones presidenciales del 16 de mayo. Ya en el pasado sometieron al país a la misma incertidumbre, forzando una reforma constitucional con el único propósito de permitir la reelección presidencial, y de esta forma abrirle camino al actual presidente de la República.

Los perredeístas vienen actuando en los últimos tiempos, sin la conducción de una estrategia política visible. Se ha impuesto el inmediatismo y han sustituido la estrategia por lo coyuntural. Han actuado como una veleta, que se acomoda a la dirección del viento y cambia con este, olvidando principios y escrúpulos que criticaron acremente a su principal adversario político histórico, el Dr. Joaquín Balaguer. Los perredeístas-pepeachistas en la práctica han demostrado ser más balagueristas que peñagomistas, y eso sólo tiene un nombre: oportunismo. No debemos extrañarnos si una vez el PLD y el Dr. Leonel Fernández ganan las elecciones previstas para el próximo 16 de mayo, los perredeístas consideren la necesidad de modificar la constitución nuevamente, con el único propósito de evitar que Leonel pueda optar por un nuevo mandato presidencial. Es decir, son capaces de impulsar una reforma constitucional que impida la reelección presidencial. Así se actúa en la actividad política cuando no se tienen planes a largo plazo, cuando no se es capaz de observar el bosque y nos conformamos con ver los pinos que están frente a nuestros ojos. Esto indica que no hay un líder con visión de futuro en ese partido, lo cual necesariamente lo sacará del poder.

El país tiene que impedir que el PRD haga con la Constitución de la República lo que a ellos les de la gana. Hay que enseñarle que la Carta no es un asunto que puede ser modificado de acuerdo a conveniencias particulares. La Constitución es la Ley General de la República, no de los perredeístas solamente. Actúan con gran irresponsabilidad quienes conociendo el daño que se le ocasiona al país cuando se impulsan reformas constitucionales sólo para satisfacer pretensiones de grupos particulares, callan y no actúan en defensa de los intereses de las mayorías. En el PRD hay gente que no está de acuerdo con las barbaridades que nuevamente pretende cometer el PPH con la Constitución del país, pero asumen posiciones tibias, y coquetean con quienes ostentan el poder, porque no pueden enfrentar con todas las fuerzas al que está arriba, como si la defensa de los principios que dieron origen a ese partido, fuera asunto de oportunidades y no de una conducta acorde con el pensamiento peñagomista sobre el tema.

Si la Junta Central Electoral, JCE, aún no ha sido capaz de conducir una campaña exitosa en el exterior para empadronar a los dominicanos que allí se encuentran para que voten el próximo 16 de mayo, si una cosa tan simple como esa no la han hecho, ¿qué ha de esperarse si se implementa el que se puedan presentar varios candidatos por un mismo partido político? A menos que no se pretenda convertir las próximas elecciones presidenciales en un matadero electoral, como lo bautizó varias veces el expresidente de la República, extinto profesor Juan Bosch. Y por ello es que debemos estar alerta sobre esta situación y rechazarla de plano, por lo menos para las elecciones que se efectuarán dentro de cuatro meses y no días, ya que no hay tiempo para inventar. El país está reclamando unos comicios libres, limpios y exentos de maniobras que enturbien sus resultados, por tanto, no inventen gente del PRD y el PPH y jueces de la JCE. Evitemos que el país caiga en la ingobernabilidad, que es lo que sucedería si a este pueblo le salen con chanchullos el próximo 16 de mayo.

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