SAN PEDRO DE MACORÍS. El director ejecutivo del Centro Cultural Dominico Haitiano (CCDH), Antonio Pol Emil, calificó de calamitosa la situación que atraviesan los bateyes de esta provincia, ya que las intervenciones que hace el Gobierno no llegan a esos lugares.
De acuerdo con sus declaraciones, las precariedades de los bateyes se han incrementado, ya que no hay ninguna institución que intervenga directamente en esas comunidades.
Pol Emil sostuvo que el Consejo Estatal del Azúcar (CEA) era la entidad que se encargaba del mantenimiento de las viviendas y solucionaba otros problemas a los obreros que trabajaban en los ingenios.
Manifestó que al desaparecer la industria azucarera estatal el destino de los obreros se volvió pesaroso e incierto.
Expresó que la gente que reside en los bateyes pasa por situaciones difíciles, por la falta de empleos y otros servicios básicos.
Expresó que las operaciones del ingenio Porvenir tienen sus limitaciones en comparación a la época de bonanza de la industria azucarera.
Asimismo dijo que los ancianos están desprotegidos y que los jóvenes tienen que salir del batey a otras comunidades para poder tener fuentes de empleos y conseguir su sustento.
El dirigente del CCDH entiende que las posibilidades de cambio alrededor de las comunidades bateyanas, representa muchas dudas, ya que las ayudas no llegan a los bateyes.
Al describir ese desolador panorama pidió a las autoridades correspondientes que se acuerden de los bateyes porque son comunidades necesitadas y las familias que allí residen son muy pobres.