El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunció el viernes nuevas sanciones para aislar aún más a Corea del Norte, horas después de la llegada de su hija Ivanka a Corea del Sur para la clausura de los Juegos Olímpicos. Estas medidas apuntan a más de 50 compañías navieras y buques que, según el ejecutivo estadounidense, ayudan a Pyongyang a eludir las sanciones ya impuestas. «Hoy hemos impuesto las sanciones más severas que se hayan impuesto a un país», dijo Trump en un largo discurso en la conferencia CAPC, la gran reunión anual de los conservadores estadounidenses. «Espero que salga algo positivo, ya veremos», agregó.
En una conferencia de prensa junto con el primer ministro australiano, Malcolm Turnbull, Trump advirtió también que las sanciones son solo la primera opción. «Si las sanciones no funcionan, tendremos que activar la segunda fase. La fase dos podría ser muy dura», adelantó, sin desarrollar la idea. El objetivo de las sanciones es continuar reduciendo las fuentes de ingresos y petróleo «que el régimen usa para financiar su programa nuclear».