El suministro de energía eléctrica ha estado fallando en estos días, por causas que no parecen muy claras. La CDEEE afirma que la situación obedece a que varias plantas están apagadas para mantenimiento preventivo o programado. ¿Es usual sacar simultáneamente tanta potencia del sistema, como en esta ocasión? Mientras el hacha va y viene, la justificación dada por el organismo oficial encuentra contradictores. Por ejemplo, la Asociación Dominicana de la Industria Eléctrica (ADIE) achaca las interrupciones a las “Edes”, que por “razones comerciales” estarían demandando menos energía.
La discrepancia entre estas versiones nos lleva a sospechar que aunque haya un poco de una cosa y otro poco de la otra, podría haber una tercera explicación para esta racha de apagones. ¿Está el mercado eléctrico sometido a presiones por causas que ni son absolutamente técnicas ni absolutamente de caída de la demanda de energía? ¿Tiene que ver la situación con la renegociación de contratos que estuvieron amparados en los Acuerdos de Madrid, a punto de expirar?
Todo hace pensar en la necesidad de que se logre el tan esperado pacto eléctrico, que parece marchar entre muchos obstáculos. El país necesita que las operaciones del mercado eléctrico sean transparentes y que dejen de sacrificar la economía a base de ineficacia.

Haití bajo hambre

Mientras el Gobierno de Haití mantiene las restricciones al ingreso por tierra de productos dominicanos, los socios humanitarios de ese país hacen ingentes esfuerzos por reunir recursos para financiar un programa contra la desnutrición de la población. Esta inconsecuencia ha inflado los precios de la mercancía dominicana en Haití, y la población tiene que pagar carísimos los artículos que importan dos o tres poderosos que pretenden desplazar los de origen dominicano.
El Gobierno de transición de Haití, que dice tener interés en mejorar el intercambio con la República Dominicana, le haría un buen servicio a sus súbditos si levantara las restricciones a las mercaderías de origen dominicano. Esto, como paso de avance y buena voluntad que mejore el ambiente para el diálogo binacional.