Kabul. Las fuerzas de seguridad de Afganistán recuperaron hoy los cadáveres de cinco trabajadores afganos de la organización no gubernamental Save the Children secuestrados hace mes y medio en la provincia de Uruzgan, en el sur del país, informaron a Efe fuentes oficiales.

Los cuerpos de los trabajadores, que fueron “asesinados a tiros por sus secuestradores”, aparecieron en el distrito de Chinartoo, dijo el portavoz del gobernador de Uruzgan, Dost Mohammad Nayab.

“Hubo varios intentos de mediación por parte de los ancianos tribales y operaciones de búsqueda del Gobierno, pero fracasaron en lograr una liberación segura de los secuestrados”, explicó el portavoz.   Nayab añadió que los talibanes están detrás del suceso y que tirotearon a los cooperantes ante la negativa del Ejecutivo a liberar a insurgentes encarcelados, tal y como demandaban.

El portavoz de los talibanes, Zabihullah Mujahid, aseguró desconocer esos hechos.   Una representante de Save the Children en Kabul, Zubaida Akbari, confirmó la muerte de los trabajadores, secuestrados el 2 de marzo mientras supervisaban proyectos de la organización a pocos kilómetros de la capital provincial, Tarinkot.

Los secuestros de cooperantes en Afganistán, el país del mundo con más sucesos de ese tipo, han ido en aumento desde que las tropas de la OTAN comenzaron a retirarse a mediados de 2011, al pasar de los 51 incidentes ocurridos ese año a 81 en 2013, de acuerdo con la Base de Datos sobre Seguridad de Trabajadores Humanitarios (AWSD).

Las emboscadas y los ataques en carretera son las formas de secuestro de cooperantes más comunes en el país asiático, donde los cautiverios suelen ser de corta duración y responden a una demostración de control por parte de la insurgencia o bien a razones económicas. EFE