Las Grandes Ligas inician con fuerza este 2004 luego de un par de partidos celebrados en Japón entre los Devil Rays de Tampa Bay y los Yanquis de Nueva York.
En este lado del mundo se abren los estadios de las mayores para darle inicio a 162 encuentros por equipo, los cuales definirán quiénes irán a la postemporada a pelear por el campeonato.
Veamos los principales equipos que salen con esperanzas de competir por el banderín y un anillo de campeón.
[b]LOS YANQUIS[/b]
Por tercera temporada consecutiva, los Yanquis de Nueva York regresan en búsqueda del anillo de campeón que le arrebataron los Diamondbacks de Arizona hace un par de años.
Para fortalecer sus oportunidades adquirieron a Alex Rodríguez, Gary Sheffield y Javier Vazquez durante la temporada muerta.
Sin embargo, perdieron a dos estelares de la rotación en las personas de Roger Clemens y Andy Pettitte, siendo esta última la pérdida más sensible de todas.
Joe Torre tendrá la labor de mantener en el pleito al equipo más caro del béisbol y brindarle al dueño George Steinbrenner la corona que por ya hace unos años ha anhelado.
[b]LOS MEDIAS ROJAS[/b]
Los enemigos a muerte de los Yanquis de Nueva York, los Medias Rojas de Boston tratarán de ponerle fin a la hegemonía de los nativos del Bronx.
Al igual que los Yanquis, los Medias Rojas se fortalecieron considerablemente al traer a sus filas a la figura del estelar Curt Schilling para unirse a Pedro Martínez y Derek Lowe como los abridores supremos del Fenway Park.
La ofensiva bostoniana sigue siendo una de las mejores de todo el negocio, contando con bateadores como Manny Ramírez y David Ortiz, ambos capaces de disparar por encima de 30 jonrones y empujar más de 100 carreras. La lesión de Nomar Garciaparra para el inicio del año podría retrasarlos un poco.
La adquisición del cerrador Keith Foulke podría ser la clave del éxito de Boston ya que el año pasado pasaron a la postemporada sin contar con un relevo decente. Esta temporada las cosas serían diferentes tras la contratación de una figura capaz de salvar sobre 30 partidos.
[b]LOS ORIOLES[/b]
El dueño Peter Angelos aprovechó el haber salido del contrato de Albert Belle y de otros jugadores caros que ya ni jugaban para hacer un movimiento maestro en la temporada muerta.
Con las firmas de Miguel Tejada, Javy López y Rafael Palmeiro, los Orioles inmediatamente se meten en la competencia con los Medias Rojas y los Yanquis.
El nuevo dirigente Lee Mazzilli tendrá la responsabilidad de cuadrar un esquema ganador con los jugadores que posee aunque no será nada fácil, principalmente luego de la pérdida de Omar Daal por una lesión al comienzo del año.
El pitcheo será el punto débil de los Orioles para comenzar el año. Si logran mantenerse con lo que tienen, harán un buen papel.
[b]LOS REALES[/b]
El dirigente Tony Peña es la figura central de esta organización de los Reales de Kansas City.
Con muchas lesiones y poca experiencia, los Reales batallaron el año completo y se mantuvieron en la cima hasta las semanas finales. Con la llegada de Juan González como un bateador de poder, Kansas City se mantiene como un candidato principal en la División Central.
El Novato del Año del 2003, Angel Berroa, tendrá que demostrar que no cree en maldiciones de segundo año y asumir su nuevo rol como primer bate de los Reales.
El pitcheo abridor es una incógnita, principalmente por las lesiones de Jeremy Affeldt, Miguel Asencio y Runelvys Hernández.
[b]LOS MELLIZOS[/b]
Los Mellizos de Minnesota son uno de los equipos más desmejorados con relación al año anterior.
La partida del cerrador Eddie Guardado es un golpe que los Mellizos podrían no aguantar.
Además, no hicieron movimientos positivos para sumar talentos a la alineación o a la rotación.
Sus principales herramientas ofensivas se mantienen siendo Torii Hunter y el dominicano Cristian Guzmán, de quien se espera una resurrección luego de un año por debajo en el 2003.
[b]LOS MEDIAS BLANCAS[/b]
El equipo de la Liga Americana en la Ciudad de los Vientos tiene en este 2004 la presencia de un nuevo dirigente en la persona de Ozzie Guillén.
Guillén de inmediato ha enfrentado algunos pequeños choques con el toletero Frank Thomas, quien ha venido arrastrando rencillas con la organización desde hace unas temporadas.
Pero los Medias Blancas, a pesar de la partida de Bartolo Colón, se mantienen como una opción a considerar en la División Central, la más débil de toda la Liga Americana.
[b]LOS ANGELINOS[/b]
El dueño Arte Moreno demostró que cuando existe la voluntad de hacer algo, todo es posible.
Eso fue lo que hizo al contratar a Vladimir Guerrero y a José Guillén para fortalecer su alineación. Y al traer los brazos de Bartolo Colón y Kelvim Escobar para mejorar la rotación.
Los Angelinos ganaron un campeonato en la temporada del 2002 y ahora lucen como los favoritos a ganar la División Oeste para medirse en la postemporada con los demás jerarcas del béisbol.
Al pensar en lo que ya tenían y darle esta nueva cara a los Angelinos, la División Oeste parece estar destinada a rendirse a sus pies.
[b]LOS ATLETICOS[/b]
Los Atléticos fueron los más debilitados durante la temporada muerta ya que perdieron a su líder, en la persona del torpedero Miguel Tejada, que ahora está en Baltimore.
Sin embargo, la gerencia de Oakland hizo lo necesario para retener al antesalista Eric Chavez y todavía mantienen una de las mejores rotaciones de todo el béisbol.
Con la presencia de Barry Zito, Tim Hudson y Mark Mulder las esperanzas se mantienen por todo lo alto con este equipo de los Atléticos.
[b]LOS FILIS[/b]
Para el 2003, los Filis pensaban que tendrían más oportunidades de hacer la postemporada.
Tenían a Jim Thome y contaban con Kevin Millwood para encabezar su rotación de pitcheo.
Sin embargo, el relevo fue un fracaso y las cosas no salieron como debían haber salido. Por eso, para el 2004 hicieron algunos cambios y consiguieron a Billy Wagner, desde Houston, además de sumar a su bullpen a Tim Worrell, desde los Gigantes de San Francisco.
Estos movimientos han convertido a los Filis en los candidatos principales a ganar la División Este, y ponerle fin a la racha de los Bravos de Atlanta.
El inconveniente principal es el flaco servicio del dirigente Larry Bowa, un hombre que ha sido criticado por sus propios peloteros por no saber manejarse.
[b]LOS BRAVOS[/b]
Los reyes del Este ya no lucen tan temibles como antes. Y es que luego de perder tres nombres como los de Greg Maddux, Gary Sheffield y Javy López, todo en una sola temporada muerta, las cosas no lucen muy buenas para los Bravos.
Pero todavía el corazón principal se mantiene siendo el mismo aunque la rotación ya no es tan segura como en el pasado, contando este año como primer abridor con Mike Hampton.
La salud de John Smoltz ha sido puesta en tela de juicio, principalmente después de haber perdido un tiempo considerable de juego al finalizar el 2003.
El dirigente Bobby Cox podría conseguir la gloria y un respeto inmensurable como capataz, o perder todos los bonos que había conseguido.
[b]LOS MARLINS[/b]
Se dice que al campeón hay que vencerlo en el terreno de juego y eso es lo que tendrá que suceder con los Marlins de La Florida.
Aunque ya no cuentan con Iván Rodríguez o con Ugueth Urbina, dos de las figuras centrales del campeonato del año pasado, los Marlins lucen todavía como una potencia.
Esto, por supuesto, si mantienen el estilo de juego que los llevó a destronar a los Yanquis de Nueva York.
Luis Castillo y Juan Pierre seguirán siendo las bujías inspiradoras de la alienación, mientras que el dominicano Abraham Nuñez parece haber obligado al dirigente Jack McKeon a colocarlo en su lista de jugadores.
El pitcheo joven de Dontrelle Willis y otros brazos tiernos pueden ser decisivos en sus aspiraciones.
[b]LOS CACHORROS[/b]
Todo el fanático del béisbol sabe que los Cachorros estuvieron a cinco outs de la Serie Mundial.
Este año se espera que sí logren llegar a la misma y es que cada vez más, este equipo de la Ciudad de los Vientos tiene la pinta de ser un equipo campeón.
Con una ofensiva temible encabezada por Sammy Sosa, Moisés Alou, Aramis Ramírez y Derek Lee; y una rotación que cuenta con Mark Prior, Kerry Wood y Greg Maddux, para nombrar algunos, los Cubs tienen pinta de campeones.
La salud de los miembros del club jugará un papel clave en lo que puedan o no lograr este año… sin hablar de la Maldición de la Cabra, a la que tantos recurrieron para justificar la derrota del 2003.
El dirigente Dusty Baker solo necesita mejorar su manejo de los lanzadores y los Cachorros irán tan lejos como puedan.
[b]LOS ASTROS[/b]
Houston es una ciudad hogareña y eso fue importante para que pudieran conseguir a sus dos principales hombres esta temporada muerta.
Sino pregúntenle a Andy Pettitte y a Roger Clemens por qué visten la gorra de los Astros este año.
A pesar de haber perdido a su cerrador Billy Wagner, tienen al dominicano Octavio Dotel para ocupar ese puesto luego de haberse convertido en el mejor preparador de mesa del negocio.
Sin importar el paso de los años, el bate de Jeff Bagwell se mantiene joven y con el potencial de 40 jonrones y 100 empujadas, como también lo tiene Lance Berkman.
Los Astros pelearán con los Cachorros de Chicago por el banderín de la
[b]LOS CARDENALES[/b]
El dirigente Tony La Russa tiene todo bien amarrado para la temporada del 2004.
El sabe que no salen como los favoritos de la División Central de la Liga Nacional y eso le gusta.
Nadie sabe por qué no se movieron mucho durante la temporada muerta, pero el mejor golpe lo dieron al asegurar a largo plazo al toletero dominicano Albert Pujols para mantenerse con Jim Edmonds y Edgar Rentería en su alineación.
El pitcheo de Woody Williams jugará un papel crucial para los Cardenales, al igual que el de sus demás lanzadores.
[b]LOS GIGANTES[/b]
El año pasado el dirigente Felipe Alou logró hacer un punta a punta con los Gigantes de San Francisco.
Sin embargo, se fueron en la primera ronda de la postemporada al medirse a los Marlins de La Florida.
Este año la nube de los esteroides se mantendrá por encima de la cabeza de Barry Bonds, además del hecho de haber perdido mucho talento en la agencia libre, como fue el caso de Rich Aurilia.
A Felipe ya lo han comenzado a tildar de tumba brazos en referencia al bullpen, así que este será un año interesante para los Gigantes.
[b]LOS DODGERS[/b]
Los inquilinos del Dodger Stadium parece que van a tener problemas en la temporada del 2004.
Y es que la ofensiva sigue siendo un punto escaso para la franquicia californiana.
Su principal adquisición ofensiva fue la de Juan Encarnación y necesitarán una mayor producción de Adrián Beltré y de Shawn Green, porque de lo contrario se quedarán fuera de la pelea.
En la rotación de pitcheo mantienen la esperanza de que se recupere el zurdo Odalis Pérez, mientras el carismático José Lima podría colarse en este estadio grande como una opción viable para ganar por encima de 15 encuentros si le dan el chance y mantiene la salud.